Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Nehemías 10:29 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

29 se unieron a sus parientes que ocupaban cargos importantes y se comprometieron, bajo juramento, a vivir conforme a la Ley que Dios les había dado por medio de su servidor Moisés, y a obedecer todos los mandamientos, ordenanzas y estatutos del Señor, Soberano nuestro.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

29 se reunieron con sus hermanos y sus principales, para protestar y jurar que andarían en la ley de Dios, que fue dada por Moisés siervo de Dios, y que guardarían y cumplirían todos los mandamientos, decretos y estatutos de Jehová nuestro Señor.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

29 se unió a sus jefes y se comprometió mediante juramento. Juraron que caería una maldición sobre ellos mismos si dejaban de obedecer la ley de Dios dada por medio de su siervo Moisés. Prometieron solemnemente seguir al pie de la letra todos los mandatos, las ordenanzas y los decretos del Señor, nuestro Señor:

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

29 Y el resto del pueblo: sacerdotes, levitas, porteros, cantores, servidores, en una palabra todos los que se separaron de la gente extranjera para obedecer a la Ley de Dios junto con sus mujeres, sus hijos y sus hijas que estaban en edad de comprender.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

29 se unieron a sus hermanos, sus nobles,° y acudieron con la promesa y el juramento de andar en la Ley de Dios, dada por Moisés, siervo de Dios, y observar y cumplir todos los mandamientos de YHVH nuestro Señor, así como sus decretos y estatutos;

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

29 Los demás del pueblo, los sacerdotes, los levitas, los porteros, los cantores, los donados y todos los que se habían separado de la gente del país para seguir la ley de Dios, sus mujeres, sus hijos y sus hijas, y todos los que tenían uso de razón,

Gade chapit la Kopi




Nehemías 10:29
38 Referans Kwoze  

Sin embargo, Jehú no cumplió con todo el corazón la Ley del Señor, Dios de Israel, pues no se apartó de los pecados con que Jeroboán hizo pecar a los israelitas.


Después se puso de pie junto a la columna del rey y en presencia del Señor renovó el pacto. Se comprometió a seguir al Señor y a cumplir, de todo corazón y con toda el alma, sus mandamientos, estatutos y mandatos, reafirmando así las palabras del pacto escritas en este libro. Y todo el pueblo confirmó el pacto.


Los primeros en ocupar nuevamente sus posesiones y ciudades fueron israelitas, sacerdotes, levitas y servidores del Templo.


Después se puso de pie junto a la columna del rey y en presencia del Señor renovó el pacto. Se comprometió a seguir al Señor y a cumplir, de todo corazón y con toda el alma, sus mandamientos, estatutos y mandatos, cumpliendo así las palabras del pacto escritas en este libro.


»Y ahora, Señor, Dios de Israel, cumple también la promesa que hiciste a tu siervo, mi padre David, cuando dijiste: “Si tus hijos observan una buena conducta, viviendo de acuerdo con mi Ley como tú lo has hecho, nunca te faltará un descendiente que ocupe el trono de Israel en mi presencia”.


Entonces los reprendí y los maldije; a algunos de ellos los golpeé, y hasta les arranqué los pelos, y los obligué a jurar por Dios. Les dije: «No permitan que sus hijas se casen con los hijos de ellos, ni se casen ustedes ni sus hijos con las hijas de ellos.


De los servidores del Templo: los descendientes de Zijá, Jasufá, Tabaot,


Así que el día primero del mes séptimo, el sacerdote Esdras llevó la Ley ante la asamblea, que estaba compuesta de hombres y mujeres y de todos los que podían comprender la lectura.


Entonces la leyó en presencia de ellos desde el alba hasta el mediodía en la plaza que está frente a la puerta del Agua. Todo el pueblo estaba muy atento a la lectura del libro de la Ley.


Habiéndose separado de los extranjeros, se pusieron de pie y confesaron públicamente sus propios pecados y la maldad de sus antepasados.


»Por todo esto, nosotros hacemos este pacto y lo ponemos por escrito, firmado por nuestros líderes, levitas y sacerdotes».


para que ellos observaran sus estatutos y pusieran en práctica sus leyes. ¡Aleluya!


Hice un juramento y lo he confirmado: que cumpliré tus justas leyes.


Oh Señor, Soberano nuestro, ¡qué imponente es tu nombre en toda la tierra! ¡Has puesto tu gloria sobre los cielos!


Oh Señor, Soberano nuestro, ¡qué imponente es tu nombre en toda la tierra!


En verdad, el Señor tendrá compasión de Jacob y elegirá de nuevo a Israel. Los asentará en su propio lugar. Los extranjeros se juntarán con ellos y se unirán a los descendientes de Jacob.


Tú les advertirás que así dice el Señor: ‘Si no me obedecen ni siguen la Ley que yo he entregado


Ustedes, en cambio, al proclamar la libertad de su prójimo, se habían convertido y habían hecho lo que yo apruebo. Además, se habían comprometido con un pacto en mi presencia, en la casa que lleva mi Nombre.


Infundiré mi Espíritu en ustedes y haré que sigan mis estatutos y obedezcan mis leyes.


Sean ustedes santos porque yo, el Señor, soy santo y los he distinguido entre las demás naciones, para que sean míos.


»Acuérdense de la Ley de mi siervo Moisés. Recuerden los estatutos y las ordenanzas que di en Horeb para todo Israel.


—aquí el sacerdote pondrá a la mujer bajo esta maldición—, que el Señor te haga objeto de maldición en medio de tu pueblo, que te haga estéril y que el vientre se te hinche.


pues la Ley fue dada por medio de Moisés, mientras que la gracia y la verdad nos han llegado por medio de Jesucristo.


Ustedes son mis amigos si hacen lo que yo les mando.


¿No les ha dado Moisés la Ley a ustedes? Sin embargo, ninguno de ustedes la cumple. ¿Por qué tratan entonces de matarme?


Cuando él llegó y vio las evidencias de la gracia de Dios, se alegró y animó a todos a hacerse el firme propósito de permanecer fieles al Señor,


Algunas personas se unieron a Pablo y creyeron. Entre ellos estaba Dionisio, miembro del Areópago, una mujer llamada Dámaris y otros más.


No se deje convencer, porque más de cuarenta de ellos van a tenderle una emboscada. Han jurado bajo maldición no comer ni beber hasta que hayan logrado matarlo. Ya están listos; solo aguardan a que usted prometa concederles su petición.


El amor debe ser sincero. Aborrezcan el mal; aférrense al bien.


Es la ley que nos dio Moisés, la herencia de la asamblea de Jacob.


Moisés convocó a todo Israel y dijo: Escuchen, israelitas, los estatutos y las leyes que yo les comunico hoy. Apréndanlos y procuren ponerlos en práctica.


Tengan, pues, cuidado de hacer lo que el Señor su Dios ha mandado; no se desvíen ni a la derecha ni a la izquierda.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite