Malaquías 1:11 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

¹¹ Porque desde donde nace el sol hasta donde se pone, grande es mi nombre entre las naciones. En todo lugar se ofrece incienso y ofrendas puras a mi nombre, porque grande es mi nombre entre las naciones —dice el Señor de los Ejércitos—.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹¹ Porque desde donde el sol nace hasta donde se pone, es grande mi nombre entre las naciones; y en todo lugar se ofrece a mi nombre incienso y ofrenda limpia, porque grande es mi nombre entre las naciones, dice Jehová de los ejércitos.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹¹ Sin embargo, mi nombre es honrado desde la mañana hasta la noche por gente de otras naciones. En todo el mundo ofrecen incienso dulce y ofrendas puras en honor de mi nombre. Pues mi nombre es grande entre las naciones», dice el Señor de los Ejércitos Celestiales.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹¹ Desde donde sale el sol hasta el ocaso, en cambio, todas las naciones me respetan y en todo el mundo se ofrece a mi Nombre tanto el humo del incienso como una ofrenda pura. Porque mi Nombre es grande en las mismas naciones paganas, dice Yavé de los ejércitos.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹¹ Desde el levante del sol hasta su ocaso, mi Nombre es grande entre las naciones, y en todo lugar se ofrecerá a mi Nombre sacrificio de incienso y ofrenda limpia, porque mi Nombre es grande entre las naciones, dice YHVH Sebaot.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹¹ Porque desde el lugar por donde sale el sol hasta el lugar de su ocaso, mi nombre es grande entre las naciones; y en todo lugar, un sacrificio humeante, una oblación pura, se ofrece a mi nombre, porque grande es mi nombre entre las naciones -dice Yahveh Sebaot-.

Malaquías 1:11 Referans Kwoze

1 Crónicas 16:25

»¡Grande es el Señor y digno de alabanza, más temible que todos los dioses!

Salmos 111:9

Pagó el precio del rescate de su pueblo y estableció su pacto para siempre. Su nombre es santo y temible.

Salmos 113:3

Desde la salida del sol hasta su ocaso, sea alabado el nombre del Señor.

Salmos 138:5

Celebrarán con cánticos tus caminos, porque tu gloria, Señor, es grande.

Salmos 141:2

Que suba a tu presencia mi oración como una ofrenda de incienso, mis manos levantadas como el sacrificio de la tarde.

Salmos 45:17

Haré que tu nombre se recuerde por todas las generaciones; por eso las naciones te alabarán eternamente y para siempre.

Salmos 48:10

Tu alabanza, oh Dios, igual que tu nombre, llega a los confines de la tierra; tu derecha está llena de justicia.

Salmos 48:11

El monte Sión se alegra, las aldeas de Judá se regocijan por causa de tus juicios.

Salmos 50:1

Habla el Señor, el Dios poderoso: convoca a la tierra de oriente a occidente.

Salmos 65:9

Cuidas la tierra, la riegas y la enriqueces abundantemente. Los arroyos de Dios se llenan de agua, para asegurarle trigo al pueblo, porque así preparas el campo.

Salmos 67:2

para que en la tierra sea conocido tu camino y en todas las naciones, tu salvación.

Salmos 86:9

Todas las naciones que has hecho vendrán, Señor, y ante ti se postrarán y glorificarán tu nombre.

Salmos 96:8

¡Tributen al Señor la gloria que merece su nombre! ¡Traigan sus ofrendas y entren en sus atrios!

Isaías 12:4

En aquel día dirán: «Alaben al Señor, invoquen su nombre; den a conocer entre los pueblos sus obras; proclamen la grandeza de su nombre.

Isaías 12:5

Canten salmos al Señor, porque ha hecho maravillas; que esto se dé a conocer en toda la tierra.

Isaías 19:21

De modo que el Señor se dará a conocer a los egipcios y en aquel día ellos reconocerán al Señor: lo servirán con sacrificios y ofrendas de grano. Harán promesas al Señor y se las cumplirán.

Isaías 30:27

¡Miren! El nombre del Señor viene de lejos, con ardiente ira y densa humareda. Sus labios están llenos de furor; su lengua es como un fuego consumidor.

Isaías 45:6

para que sepan de oriente a occidente que no hay ningún otro fuera de mí. Yo soy el Señor y no hay ningún otro.

Isaías 54:5

Porque el que te hizo es tu esposo; su nombre es el Señor de los Ejércitos. Tu Redentor es el Santo de Israel; ¡Dios de toda la tierra es su nombre!

Isaías 59:19

Desde el occidente temerán al nombre del Señor, y desde el oriente respetarán su gloria. Porque vendrá como un torrente caudaloso, impulsado por el soplo del Señor.

Isaías 66:18

«Yo, por causa de sus acciones y sus pensamientos, estoy a punto de reunir a gente de toda nación y lengua; vendrán y verán mi gloria.

Jeremías 10:6

¡No hay nadie como tú, Señor! ¡Grande eres tú! ¡Grande y poderoso es tu nombre!

Jeremías 10:7

¿Quién no te temerá, Rey de las naciones? ¡Es lo que te corresponde! Entre todos los sabios de las naciones, y entre todos los reinos, no hay nadie como tú.

Jeremías 4:2

si con fidelidad, justicia y rectitud juras diciendo: “Tan cierto como que el Señor vive”, entonces en él serán benditas las naciones y en él se gloriarán».

Daniel 2:45

Este es el significado de la roca que fue cortada de la montaña no por manos humanas, que hizo añicos al hierro, al bronce, al barro, a la plata y al oro. »El gran Dios ha mostrado a Su Majestad lo que tendrá lugar en el futuro. El sueño es verdadero y esta interpretación, digna de confianza».

Amós 9:12

para que ellos posean el remanente de Edom y todas las naciones sobre las que se ha invocado mi nombre», afirma el Señor, quien hará estas cosas.

Miqueas 5:4

Él se establecerá y los pastoreará con el poder del Señor, con la majestad del nombre del Señor su Dios. Vivirán seguros, porque él dominará hasta los confines de la tierra.

Sofonías 2:11

El Señor será terrible contra ellos, cuando destruya a todos los dioses de la tierra; y así hasta las naciones más remotas se postrarán en adoración ante él, cada cual en su propia tierra.

Sofonías 3:9

»Purificaré los labios de los pueblos para que todos invoquen el nombre del Señor y lo sirvan de común acuerdo.

Zacarías 8:7

»Así dice el Señor de los Ejércitos: “Salvaré a mi pueblo de los países de oriente y de occidente.

Malaquías 1:14

»¡Maldito sea el tramposo que, teniendo un macho aceptable en su rebaño, se lo dedica al Señor y luego le ofrece un animal mutilado! Porque yo soy el gran Rey —dice el Señor de los Ejércitos— y mi nombre es temido entre las naciones.

Malaquías 3:3

Se sentará como fundidor y purificador de plata; purificará a los levitas y los refinará como se refinan el oro y la plata. Entonces traerán al Señor ofrendas conforme a la justicia,

Números 7:74

También presentó una bandeja de oro de diez siclos, llena de incienso.

Mateo 28:19

Por tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo,

Mateo 8:11

Les digo que muchos vendrán del oriente y del occidente, y participarán en el banquete con Abraham, Isaac y Jacob en el reino de los cielos.

Lucas 1:10

Cuando llegó la hora de ofrecer el incienso, la multitud reunida afuera estaba orando.

Romanos 12:1

Por lo tanto, hermanos, tomando en cuenta la misericordia de Dios, ruego que cada uno de ustedes, en adoración espiritual, ofrezca su cuerpo como sacrificio vivo, santo y agradable a Dios.

Romanos 15:16

para ser ministro de Cristo Jesús a los no judíos. Yo tengo el deber sacerdotal de proclamar el evangelio de Dios, a fin de que los no judíos lleguen a ser una ofrenda aceptable a Dios, santificada por el Espíritu Santo.

Filipenses 4:18

Ya he recibido todo lo que necesito y aún más; tengo hasta de sobra ahora que he recibido de Epafrodito lo que me enviaron. Es una ofrenda fragante, un sacrificio que Dios acepta con agrado.

2 Tesalonicenses 1:12

Oramos así, de modo que el nombre de nuestro Señor Jesús sea glorificado por medio de ustedes, y ustedes por él, conforme a la gracia de nuestro Dios y del Señor Jesucristo.

1 Timoteo 2:8

Quiero, pues, que en todas partes los hombres oren, levantando las manos al cielo con santidad, sin enojos ni contiendas.

Apocalipsis 11:15

Tocó el séptimo ángel su trompeta y en el cielo resonaron fuertes voces que decían: «El reino del mundo ha pasado a ser de nuestro Señor y de su Cristo, y él reinará por los siglos de los siglos».

Apocalipsis 15:4

¿Quién no te temerá, oh Señor? ¿Quién no glorificará tu nombre? Solo tú eres santo. Todas las naciones vendrán y te adorarán, porque han salido a la luz las obras de tu justicia».

Apocalipsis 5:8

Cuando lo tomó, los cuatro seres vivientes y los veinticuatro ancianos se postraron delante del Cordero. Cada uno tenía un arpa y copas de oro llenas de incienso, que son las oraciones del pueblo de Dios.