Lamentaciones 3:7 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

⁷ Me tiene encerrado, no puedo escapar; me ha puesto pesadas cadenas.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

⁷ Me cercó por todos lados, y no puedo salir; ha hecho más pesadas mis cadenas;

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁷ Me cercó con un muro, y no puedo escapar; me ató con pesadas cadenas.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁷ Me encarceló y no puedo salir, me puso pesadas cadenas.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁷ g Me ha cercado sin salida, me ha cargado de cadenas;°

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁷ Guímel. Me amuralló, y no puedo salir; hizo más pesadas mis cadenas.

Lamentaciones 3:7 Referans Kwoze

Job 19:8

Dios me ha cerrado el camino y no puedo pasar; ha cubierto de oscuridad mis senderos.

Job 3:23

¿Por qué arrincona Dios al hombre que desconoce su destino?

Salmos 88:8

Me has quitado a todos mis amigos y ante ellos me has hecho aborrecible. Estoy aprisionado y no puedo librarme;

Salmos 88:9

los ojos se me nublan de tristeza. Yo, Señor, te invoco cada día y hacia ti extiendo las manos.

Jeremías 38:6

Ellos tomaron a Jeremías y, bajándolo con cuerdas, lo echaron en la cisterna del patio de la guardia, la cual era de Malquías, el hijo del rey. Pero como en la cisterna no había agua, sino lodo, Jeremías se hundió en él.

Jeremías 40:4

No obstante, hoy te libero de las cadenas que te sujetan las manos. Si quieres venir conmigo a Babilonia, ven, que yo te cuidaré. Pero si no quieres, no lo hagas. Mira, tienes ante tus ojos toda la tierra: ve adonde más te convenga».

Lamentaciones 1:14

»Mis pecados fueron atados a un yugo; sus manos los ataron juntos. Me los ha colgado al cuello, y ha debilitado mis fuerzas. Me ha entregado en manos de gente a la que no puedo ofrecer resistencia.

Lamentaciones 3:9

Cerró mi camino con bloques de piedra; ha torcido mis senderos.

Lamentaciones 5:5

Los que nos persiguen nos pisan los talones; estamos fatigados y no hallamos descanso.

Daniel 9:12

Tú has cumplido las advertencias que hiciste a nuestros gobernantes y a nosotros; has traído sobre nosotros esta gran calamidad. Jamás ha ocurrido bajo el cielo nada semejante a lo que sucedió con Jerusalén.

Oseas 2:6

Por eso le cerraré el paso con espinos; la encerraré para que no encuentre el camino.