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Job 4:17 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

17 “¿Puede un simple mortal ser más justo que Dios? ¿Puede ser más puro el hombre que su Creador?

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Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

17 ¿Será el hombre más justo que Dios? ¿Será el varón más limpio que el que lo hizo?

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Biblia Nueva Traducción Viviente

17 “¿Puede un mortal ser inocente ante Dios? ¿Puede alguien ser puro ante el Creador?”.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

17 ¿Hay algún hombre que se encuentre bueno delante de Dios?

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La Biblia Textual 3a Edicion

17 ¿Será el mortal más justo que Dios? ¿El hombre, más puro que su Hacedor?

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

17 ¿Acaso un mortal es justo ante Dios? Ante su Hacedor, ¿es inocente el hombre?

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Job 4:17
25 Referans Kwoze  

¡Lejos de ti el hacer tal cosa! ¿Matar al justo junto con el malvado y que ambos sean tratados de la misma manera? ¡Jamás hagas tal cosa! Tú, que eres el Juez de toda la tierra, ¿no harás justicia?


¿Quién de la inmundicia puede sacar pureza? ¡No hay nadie que pueda hacerlo!


»¿Qué es el hombre para creerse puro y el nacido de mujer para alegar inocencia?


¿Cómo puede una persona declararse justo ante Dios? ¿Cómo puede alegar pureza quien ha nacido de mujer?


El mismo Dios que me formó en el vientre fue el que los formó también a ellos; nos dio forma en el seno materno.


Yo no sé adular a nadie; si lo hiciera, mi Creador muy pronto me castigaría.


Pero nadie dice: “¿Dónde está Dios, mi Hacedor, que me inspira cánticos por las noches,


«Job, ¿crees tener la razón cuando afirmas: “Mi justicia es mayor que la de Dios”?


Mi conocimiento proviene de muy lejos; voy a demostrar que mi Hacedor está en lo justo.


Una silueta se plantó frente a mis ojos, pero no pude ver quién era. Detuvo su marcha, y escuché una voz que susurraba:


»¿Vas acaso a invalidar mi justicia? ¿Me condenarás para justificarte?


¿Acaso Dios pervierte la justicia? ¿Acaso tuerce el derecho el Todopoderoso?


«Aunque sé muy bien que esto es cierto, ¿cómo puede un mortal justificarse ante Dios?


No lleves a juicio a tu siervo, pues ante ti nadie puede alegar inocencia.


El Señor es justo en todos sus caminos y bondadoso en todas sus obras.


No hay en la tierra nadie tan justo que haga el bien y nunca peque.


Tú, Señor, eres justo cuando argumento contigo. Sin embargo, quisiera exponerte algunas cuestiones de justicia. ¿Por qué prosperan los malvados? ¿Por qué viven tranquilos los traidores?


Nada hay tan engañoso como el corazón. No tiene remedio. ¿Quién puede comprenderlo?


¡Qué profundo es el conocimiento, la riqueza y la sabiduría de Dios! ¡Qué indescifrables sus juicios e impenetrables sus caminos!


Pero por tu obstinación y por tu corazón sin arrepentimiento sigues acumulando castigo contra ti mismo para el día de la ira, cuando Dios revelará su justo juicio.


Respondo: ¿Quién eres tú para pedirle cuentas a Dios? «Acaso le dirá la olla de barro al que la modeló: “¿Por qué me hiciste así?”».


Cada uno de ellos tenía seis alas y estaba cubierto de ojos, por encima y por debajo de las alas. De día y de noche repetían sin cesar: «Santo, santo, santo es el Señor Dios Todopoderoso, el que era y que es y que ha de venir».


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