Job 23:16 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

¹⁶ Dios ha hecho que mi corazón desmaye; me tiene aterrado el Todopoderoso.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹⁶ Dios ha enervado mi corazón, Y me ha turbado el Omnipotente.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁶ Dios me ha enfermado el corazón; el Todopoderoso me ha aterrado.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁶ Dios me ha hecho perder el valor y el Omnipotente me ha espantado

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁶ Porque Dios ha hecho desmayar mi corazón, ’El-Shadday me ha aterrorizado.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁶ Dios me debilita el corazón, Sadday me llena de terror;

Job 23:16 Referans Kwoze

Job 16:12

Yo vivía tranquilo, pero él me destrozó; me agarró por el cuello y me hizo pedazos; me hizo blanco de sus ataques.

Job 23:15

Por eso me espanto en su presencia; si pienso en todo esto, me lleno de temor.

Job 27:2

«Vive Dios, el Todopoderoso, quien se niega a hacerme justicia, quien me ha amargado el ánimo,

Salmos 22:14

Como agua he sido derramado; dislocados están todos mis huesos. Mi corazón se ha vuelto como cera y se derrite en mis entrañas.

Salmos 88:16

Tu ira se ha descargado sobre mí; tus violentos ataques han acabado conmigo.

Isaías 57:16

Mi litigio no será eterno ni estaré siempre enojado, porque ante mí desfallecerían todos los seres vivientes que he creado.

Isaías 6:5

Entonces grité: «¡Ay de mí, que estoy perdido! Soy un hombre de labios impuros y vivo en medio de un pueblo de labios impuros y mis ojos han visto al Rey, al Señor de los Ejércitos».

Jeremías 51:46

No desfallezcan, no se acobarden por los rumores que corren en la tierra. Año tras año surgen nuevos rumores; rumores de violencia en la tierra y de un gobernante que se levanta contra otro.

Joel 1:15

¡Ay de aquel día! Porque el día del Señor está cerca. Vendrá como devastación de parte del Todopoderoso.

Deuteronomio 20:3

con estas palabras: «¡Escucha, Israel! Hoy vas a entrar en batalla contra tus enemigos. No te desanimes ni tengas miedo, no te acobardes ni te llenes de pavor ante ellos,

Rut 1:20

—Ya no me llamen Noemí —respondió ella—. Llámenme Mara, porque el Todopoderoso ha colmado mi vida de amargura.