Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Jeremías 29:10 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

10 Así dice el Señor: «Cuando a Babilonia se le hayan cumplido los setenta años, yo los visitaré y haré honor a mi promesa en favor de ustedes; los haré volver a este lugar.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

10 Porque así dijo Jehová: Cuando en Babilonia se cumplan los setenta años, yo os visitaré, y despertaré sobre vosotros mi buena palabra, para haceros volver a este lugar.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

10 »Esto dice el Señor: “Ustedes permanecerán en Babilonia durante setenta años; pero luego vendré y cumpliré todas las cosas buenas que les prometí, y los llevaré de regreso a casa.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

10 Cuando se cumplan los setenta años en Babilonia, los visitaré y cumpliré mi promesa de hacerlos volver a su país.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

10 Porque así dice YHVH: Cuando se hayan cumplido setenta años para con Babilonia, Yo os visitaré, y despertaré sobre vosotros mi buena palabra, para haceros volver a este lugar.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

10 Porque así dice Yahveh: 'Cuando se hayan cumplido para Babilonia setenta años, os visitaré y haré realidad en vosotros mi buena promesa de volveros a este lugar.

Gade chapit la Kopi




Jeremías 29:10
22 Referans Kwoze  

Así se cumplió la palabra que el Señor había pronunciado por medio de Jeremías. La tierra disfrutó de su descanso sabático todo el tiempo que estuvo desolada, hasta que se cumplieron setenta años.


En el primer año del reinado de Ciro, rey de Persia, el Señor movió el espíritu del rey para que promulgara un decreto en todo su reino y así se cumpliera la palabra del Señor por medio del profeta Jeremías. Tanto oralmente como por escrito, el rey decretó lo siguiente:


En el primer año del reinado de Ciro, rey de Persia, el Señor movió el espíritu del rey para que promulgara un decreto en todo su reino y así se cumpliera la palabra del Señor por medio del profeta Jeremías. Tanto oralmente como por escrito, el rey decretó lo siguiente:


«Esto es lo que ordena Ciro, rey de Persia: »El Señor, Dios del cielo, que me ha dado todos los reinos de la tierra, me ha encargado que le construya un templo en la ciudad de Jerusalén, que está en Judá.


Tus siervos sienten cariño por sus ruinas; los mueven a compasión sus escombros.


Todo este país quedará reducido a horror y ruina; estas naciones servirán al rey de Babilonia durante setenta años”.


»Pero cuando se hayan cumplido los setenta años, yo castigaré por su iniquidad al rey de Babilonia y a aquella nación, país de los babilonios, y los convertiré en ruina perpetua», afirma el Señor.


“Todo esto será llevado a Babilonia —afirma el Señor—, y allí permanecerá hasta el día en que yo lo vaya a buscar y lo devuelva a este lugar”».


Todas las naciones le servirán a él, a su hijo y a su nieto, hasta que también a su país le llegue la hora y sea sometido por numerosas naciones y grandes reyes.


Resulta que él nos envió un mensaje a Babilonia, el cual decía: La deportación va a durar mucho tiempo; así que construyan casas y habítenlas; planten huertos y coman de su fruto’ ”».


yo, el Señor, castigaré a Semaías de Nejelán y a su descendencia porque ha incitado al pueblo a rebelarse contra mí. Ninguno de su familia vivirá para contar el bien que haré a mi pueblo”», afirma el Señor.


Porque vienen días —afirma el Señor—, cuando yo haré volver del cautiverio a mi pueblo Israel y Judá; los traeré a la tierra que di a sus antepasados y la poseerán”», afirma el Señor.


»“Llegarán días —afirma el Señor—, en que cumpliré la promesa de bendición que hice a Israel y a Judá.


»Adviérteles también que así dice el Señor y Dios: “Yo los reuniré de entre las naciones; los juntaré de los países donde han estado dispersos y les daré la tierra de Israel.


En su primer año de reinado, yo, Daniel, comprendí ese pasaje de las Escrituras donde el Señor comunicó al profeta Jeremías que la ruina de Jerusalén duraría setenta años.


Y esa tierra pertenecerá al remanente del pueblo de Judá. Allí pastarán sus ovejas y al atardecer se echarán a descansar en las casas de Ascalón; porque los cuidará el Señor su Dios para restaurarlos.


Ante esto, el ángel del Señor respondió: «Señor de los Ejércitos, ¿hasta cuándo te negarás a compadecerte de Jerusalén y de las ciudades de Judá con las que has estado enojado estos setenta años?».


«Dile a todo el pueblo de la tierra y también a los sacerdotes: “Cuando ustedes ayunaban y se lamentaban en los meses quinto y séptimo de los últimos setenta años, ¿realmente ayunaban por mí?


Noemí decidió regresar de la tierra de Moab con sus dos nueras, porque allí se enteró de que el Señor había acudido en ayuda de su pueblo al proveerle de alimento.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite