Hechos 6:15 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

¹⁵ Todos los que estaban sentados en el Consejo fijaron la mirada en Esteban y vieron que su rostro se parecía al de un ángel.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹⁵ Entonces todos los que estaban sentados en el concilio, al fijar los ojos en él, vieron su rostro como el rostro de un ángel.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁵ En ese momento, todos los del Concilio Supremo fijaron la mirada en Esteban, porque su cara comenzó a brillar como la de un ángel.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁵ En ese momento todos los que estaban sentados en el Sanedrín fijaron los ojos en Esteban, y su rostro les pareció como el de un ángel.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁵ Pero al clavar en él la vista, todos los que estaban sentados en el Sanedrín vieron su rostro como el rostro de un ángel.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁵ Y fija la vista en él, todos los que estaban sentados en el sanedrín vieron su rostro como el rostro de un ángel.

Hechos 6:15 Referans Kwoze

Eclesiastés 8:1

¿Quién es como el sabio? ¿Quién conoce las respuestas? La sabiduría del hombre hace que resplandezca su rostro y se ablanden sus facciones.

Mateo 13:43

Entonces los justos brillarán en el reino de su Padre como el sol. El que tenga oídos, que oiga.

Mateo 17:2

Allí se transfiguró en presencia de ellos; su rostro resplandeció como el sol y su ropa se volvió blanca como la luz.

Mateo 5:22

Pero yo digo que todo el que se enoje con su hermano quedará sujeto al juicio del tribunal. Es más, cualquiera que insulte a su hermano quedará sujeto al juicio del Consejo. Y cualquiera que le diga: “Insensato”, quedará sujeto al fuego del infierno.

Marcos 8:25

Entonces le puso de nuevo las manos sobre los ojos, y el ciego fue curado; recobró la vista y comenzó a ver todo con claridad.

Hechos 7:1

—¿Son ciertas estas acusaciones? —le preguntó el sumo sacerdote.

2 Corintios 3:18

Así, todos nosotros, que con el rostro descubierto reflejamos como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados a su semejanza con más y más gloria por la acción del Señor, que es el Espíritu.