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Hechos 1:16 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

16 «Hermanos, tenía que cumplirse la Escritura que, por boca de David, había predicho el Espíritu Santo en cuanto a Judas, el que sirvió de guía a los que arrestaron a Jesús.

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Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

16 Varones hermanos, era necesario que se cumpliese la Escritura en que el Espíritu Santo habló antes por boca de David acerca de Judas, que fue guía de los que prendieron a Jesús,

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Biblia Nueva Traducción Viviente

16 «Hermanos —les dijo—, las Escrituras tenían que cumplirse con respecto a Judas, quien guio a los que arrestaron a Jesús. Esto lo predijo hace mucho tiempo el Espíritu Santo cuando habló por medio del rey David.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

16 Hermanos, era necesario que se cumpliera la Escritura, pues el Espíritu Santo había anunciado por boca de David el gesto de Judas; este hombre, que guió a los que prendieron a Jesús,

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La Biblia Textual 3a Edicion

16 Varones hermanos, era necesario que se cumpliera la Escritura que predijo el Espíritu Santo por boca de David acerca de Judas, quien fue guía de los que prendieron a Jesús,

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

16 'Hermanos, era preciso que se cumpliera la sentencia de la Escritura que por boca de David predijo el Espíritu Santo acerca de Judas, convertido en guía de los que prendieron a Jesús.

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Hechos 1:16
38 Referans Kwoze  

»El Espíritu del Señor habló por medio de mí; puso sus palabras en mi lengua.


De este modo, se cumplió la palabra que el Señor le había dado a conocer a Jehú: «Durante cuatro generaciones tus descendientes ocuparán el trono de Israel».


Hasta mi amigo cercano, en quien yo confiaba y que compartía el pan conmigo, se ha vuelto contra mí.


Uno de los doce, el que se llamaba Judas Iscariote, fue a los jefes de los sacerdotes.


Todavía estaba hablando Jesús cuando llegó Judas, uno de los doce. Lo acompañaba una gran turba armada con espadas y palos, enviada por los jefes de los sacerdotes y los líderes religiosos del pueblo.


Entonces, ¿cómo se cumplirían las Escrituras que dicen que así tiene que suceder?


Pero todo esto ha sucedido para que se cumpla lo que escribieron los profetas. Entonces todos los discípulos lo abandonaron y huyeron.


David mismo, hablando por el Espíritu Santo, declaró: »“Dijo el Señor a mi Señor: ‘Siéntate a mi derecha, hasta que ponga a tus enemigos debajo de tus pies’ ”.


Todavía estaba hablando Jesús cuando apareció Judas, uno de los doce. Lo acompañaba una turba armada con espadas y palos, enviada por los jefes de los sacerdotes, los maestros de la Ley y los líderes religiosos.


Todavía estaba hablando Jesús cuando se apareció una turba, y al frente iba uno de los doce, el que se llamaba Judas. Este se acercó a Jesús para besarlo,


Si Dios llamó “dioses” a aquellos para quienes vino la palabra (y la Escritura no puede ser quebrantada),


»No me refiero a todos ustedes; yo sé a quiénes he escogido. Pero esto es para que se cumpla la Escritura: “El que comparte el pan conmigo, se ha vuelto contra mí”.


Mientras estaba con ellos, los protegía y los cuidaba mediante el nombre que me diste y ninguno se perdió sino aquel que eligió perderse, a fin de que se cumpliera la Escritura.


Estas cosas sucedieron para que se cumpliera la Escritura: «No le quebrarán ningún hueso»


»Porque en el libro de los Salmos —continuó Pedro—, está escrito: »“Que su campamento quede desierto y que nadie habite en él”. También está escrito: »“Que otro se haga cargo de su oficio”.


Al terminar la lectura de la Ley y los Profetas, los jefes de la sinagoga mandaron a decirles: «Hermanos, si tienen algún mensaje de aliento para el pueblo, hablen».


»Por tanto, hermanos, sepan que por medio de Jesús se les anuncia el perdón de los pecados.


Cuando terminaron, Santiago tomó la palabra y dijo: —Hermanos, escúchenme.


Después de una larga discusión, Pedro se puso en pie y dijo: —Hermanos, ustedes saben que desde un principio Dios me escogió de entre ustedes para que por mi boca los no judíos oyeran el mensaje del evangelio y creyeran.


Este fue entregado según el determinado propósito y el previo conocimiento de Dios; y por medio de gente malvada, ustedes lo mataron, clavándolo en la cruz.


Cuando oyeron esto, todos se sintieron profundamente conmovidos y dijeron a Pedro y a los otros apóstoles: —Hermanos, ¿qué debemos hacer?


«Padres y hermanos, escuchen ahora mi defensa».


Pablo se quedó mirando fijamente al Consejo y dijo: —Hermanos, hasta hoy yo he actuado delante de Dios con toda buena conciencia.


Pablo, sabiendo que unos de ellos eran saduceos y los demás fariseos, exclamó en el Consejo: —Hermanos, yo soy fariseo de pura cepa. Me están juzgando porque he puesto mi esperanza en la resurrección de los muertos.


Tres días más tarde, Pablo convocó a los dirigentes de los judíos. Cuando estuvieron reunidos, dijo: —A mí, hermanos, a pesar de no haber hecho nada contra mi pueblo ni contra las costumbres de nuestros antepasados, me arrestaron en Jerusalén y me entregaron a los romanos.


No pudieron ponerse de acuerdo entre sí, y comenzaron a irse cuando Pablo añadió esta última declaración: —Con razón el Espíritu Santo habló a sus antepasados por medio del profeta Isaías diciendo:


Él contestó: —Hermanos y padres, ¡escúchenme! El Dios de la gloria se apareció a nuestro padre Abraham cuando este aún vivía en Mesopotamia, antes de radicarse en Jarán.


Querían descubrir a qué tiempo y a cuáles circunstancias se refería el Espíritu de Cristo, que estaba en ellos, cuando testificó de antemano acerca de los sufrimientos de Cristo y de las glorias que vendrían después de estos.


Porque la profecía no ha tenido su origen en la voluntad humana, sino que los profetas hablaron de parte de Dios, impulsados por el Espíritu Santo.


Más les hubiera valido no conocer el camino de la justicia que abandonarlo después de haber conocido el santo mandamiento que se les dio.


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