Ezequiel 16:7 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

⁷ Te hice crecer como hierba del campo. »”Creciste, te desarrollaste y entraste a la pubertad. Después se formaron tus senos y te brotó el vello, pero seguías completamente desnuda.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

⁷ Te hice multiplicar como la hierba del campo; y creciste y te hiciste grande, y llegaste a ser muy hermosa; tus pechos se habían formado, y tu pelo había crecido; pero estabas desnuda y descubierta.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁷ y te ayudé a florecer como una planta del campo. Creciste y te convertiste en una joya preciosa. Te crecieron los pechos y te salió el vello, pero seguías desnuda.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁷ y crece como una hierba del campo! Entonces comenzaste a crecer, te desarrollaste, te convertiste en una jovencita, tu pecho se afirmó y tu cabellera creció; pero estabas desnuda, no tenías nada.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁷ Como planta del campo te hice y creciste y te hiciste grande, y llegaste a ser muy hermosa. Tus pechos se habían formado, y tu pelo había crecido, pero estabas desnuda y descubierta.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁷ y crece! Como retoño del campo te hice. Creciste, te desarrollaste y llegaste a la plenitud de la belleza, tus senos se afirmaron y tu vello brotó; pero estabas desnuda, sin vestidos.

Ezequiel 16:7 Referans Kwoze

Génesis 22:17

te bendeciré en gran manera, y que multiplicaré tu descendencia —como las estrellas del cielo y como la arena del mar. Además, tu descendencia conquistará las ciudades de sus enemigos.

Job 1:21

Entonces dijo: «Desnudo salí del vientre de mi madre y desnudo he de partir. El Señor ha dado; el Señor ha quitado. ¡Bendito sea el nombre del Señor!».

Salmos 135:4

El Señor escogió a Jacob como suyo, a Israel como su propiedad exclusiva.

Salmos 147:20

Esto no lo ha hecho con ninguna otra nación; jamás han conocido ellas sus leyes. ¡Aleluya!

Salmos 148:14

¡Él ha dado poder a su pueblo! ¡A él sea la alabanza de todos sus fieles, de los hijos de Israel, su pueblo cercano! ¡Aleluya!

Éxodo 1:7

Sin embargo, los israelitas tuvieron muchos hijos y a tal grado se multiplicaron que fueron haciéndose más y más poderosos. El país se fue llenando de ellos.

Éxodo 12:37

Los israelitas partieron de Ramsés, en dirección a Sucot. Sin contar a las mujeres y a los niños, eran unos seiscientos mil hombres de a pie.

Éxodo 3:22

Toda mujer israelita pedirá a su vecina y a cualquier otra mujer que viva en su casa, objetos de oro, de plata y ropa para vestir a sus hijos y a sus hijas. Así despojarán ustedes a los egipcios».

Cantares 4:5

Tus pechos parecen dos cervatillos, dos crías mellizas de gacela que pastan entre azucenas.

Cantares 8:10

Una muralla soy yo y mis pechos, sus dos torres. Por eso a los ojos de mi amado soy como quien ha hallado la paz.

Cantares 8:8

Tan pequeña es nuestra hermana que no han crecido sus pechos. ¿Qué haremos por nuestra hermana cuando vengan a pedirla?

Isaías 61:10

Me deleito mucho en el Señor; me regocijo en mi Dios. Porque él me vistió con ropas de salvación y me cubrió con el manto de la justicia. Soy semejante a un novio que luce su diadema o una novia adornada con sus joyas.

Isaías 62:3

Serás en la mano del Señor como una corona esplendorosa, como una diadema real en la palma de tu Dios.

Ezequiel 16:16

Tomaste tus mismos vestidos para hacer altares paganos de vistosos colores y allí te prostituiste. ¡Algo nunca visto!

Ezequiel 16:22

En todas tus prácticas abominables y prostituciones no te acordaste de los días de tu adolescencia, cuando estabas completamente desnuda y pisoteando tu propia sangre.

Ezequiel 16:6

»”Pasé junto a ti y te vi revolcándote en tu propia sangre. Estando en tu propia sangre te dije: ¡Vive!

Oseas 2:3

De lo contrario, la desnudaré por completo; la dejaré como el día en que nació. La pondré como un desierto: la convertiré en tierra seca y la mataré de sed.

Hechos 7:17

»Cuando ya se acercaba el tiempo de que se cumpliera la promesa que Dios había hecho a Abraham, el pueblo crecía y se multiplicaba en Egipto.

Deuteronomio 1:10

El Señor su Dios los ha hecho tan numerosos que hoy ustedes son tantos como las estrellas del cielo.

Deuteronomio 1:11

¡Que el Señor, el Dios de sus antepasados, los multiplique mil veces más y los bendiga tal como lo prometió!

Deuteronomio 4:8

¿Y qué nación hay tan grande que tenga estatutos y ordenanzas tan justas como todas estas leyes que hoy les expongo?