2 Reyes 24:4 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

⁴ incluso por haber derramado sangre inocente, con la cual inundó a Jerusalén. Por lo tanto, el Señor no quiso perdonar.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

⁴ asimismo por la sangre inocente que derramó, pues llenó a Jerusalén de sangre inocente; Jehová, por tanto, no quiso perdonar.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁴ quien había llenado Jerusalén con sangre inocente. El Señor no perdonaba eso.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁴ pero también a causa de la sangre inocente derramada de tal forma en Jerusalén que ésta se había repletado de ella. Yavé ya no quería perdonar.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁴ y también por la sangre inocente que había derramado, pues había llenado a Jerusalem de sangre inocente, y YHVH no quiso perdonar.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁴ también por la sangre inocente que había derramado, hasta llenar de ella a Jerusalén. Por eso Yahveh no quiso perdonar.

2 Reyes 24:4 Referans Kwoze

2 Reyes 21:11

«Como Manasés, rey de Judá, ha practicado estas repugnantes ceremonias y se ha conducido peor que los amorreos que lo precedieron, haciendo que los israelitas pequen con los ídolos que él hizo,

2 Reyes 21:16

Además del pecado que hizo cometer a Judá, haciendo así lo que ofende al Señor, Manasés derramó tanta sangre inocente que inundó a Jerusalén de un extremo a otro.

2 Reyes 23:26

A pesar de eso, el Señor no apagó el gran fuego de su ira, que ardía contra Judá por todas las afrentas con que Manasés lo había provocado.

2 Reyes 24:5

Los demás acontecimientos del reinado de Joacim y todo lo que hizo están escritos en el libro de las crónicas de los reyes de Judá.

Salmos 106:38

Derramaron sangre inocente, la sangre de sus hijos y sus hijas. Al ofrecerlos en sacrificio a los ídolos de Canaán, su sangre derramada contaminó la tierra.

Proverbios 6:17

los ojos que se enaltecen, la lengua que miente, las manos que derraman sangre inocente,

Jeremías 15:4

Los haré motivo de terror para todos los reinos de la tierra, por causa de lo que Manasés, hijo de Ezequías y rey de Judá, hizo en Jerusalén.

Jeremías 19:4

Porque ellos me han abandonado. Han profanado este lugar, quemando en él incienso a otros dioses que no conocían ni ellos ni sus antepasados ni los reyes de Judá. Además, han llenado de sangre inocente este lugar.

Jeremías 2:34

Tienes la ropa manchada de sangre, de sangre de gente pobre e inocente, a los que nunca sorprendiste robando. Por todo esto

Jeremías 22:17

«Pero tus ojos y tu corazón solo buscan ganancias deshonestas, solo buscan derramar sangre inocente y practicar la opresión y la violencia».

Jeremías 32:31

Desde el día en que construyeron esta ciudad hasta hoy, ella ha sido para mí motivo de ira y de furor. Por eso la quitaré de mi presencia,

Lamentaciones 3:42

Hemos pecado, hemos sido rebeldes y tú no nos has perdonado.

Ezequiel 22:3

Adviértele que así dice el Señor y Dios: “¡Ha llegado tu hora! ¡Ciudad que derramas sangre en tus calles y te contaminas fabricando ídolos! ¡Cómo provocas tu ruina!

Ezequiel 24:6

Porque el Señor y Dios dice: »”¡Ay de la ciudad sanguinaria! ¡Ay de esa olla oxidada, cuyo óxido no se puede quitar! Saca uno a uno los trozos de carne, tal como vayan saliendo.

Ezequiel 24:8

Sobre la roca desnuda he vertido su sangre, para que no quede cubierta. Así haré que se encienda mi ira y daré lugar a mi venganza.

Ezequiel 33:25

Por tanto, adviérteles que así dice el Señor y Dios: “Ustedes comen carne con sangre, adoran a sus ídolos y derraman sangre, ¿y aun así pretenden poseer el país?

Números 35:33

»No contaminarán la tierra que habitan. El derramamiento de sangre contamina la tierra, y solo con la sangre de aquel que la derramó es posible purificar la tierra.

Deuteronomio 19:10

De este modo, no se derramará sangre inocente en la tierra que el Señor tu Dios te da por herencia, y tú no serás culpable de homicidio.

Deuteronomio 29:19

Si alguno de ustedes, al oír las palabras de este juramento, se cree bueno y piensa: «Todo me saldrá bien, aunque persista yo en hacer lo que me plazca», provocará la ruina tanto en la tierra regada como en la seca.