Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





1 Crónicas 21:17 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

17 Y David dijo a Dios: «Señor y Dios mío, ¿acaso no fui yo el que dio la orden de censar al pueblo? ¿Qué culpa tienen estas ovejas? ¡Soy yo el que ha pecado! ¡He actuado muy mal! ¡Descarga tu mano sobre mí y sobre mi familia, pero no sigas hiriendo a tu pueblo!».

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

17 Y dijo David a Dios: ¿No soy yo el que hizo contar el pueblo? Yo mismo soy el que pequé, y ciertamente he hecho mal; pero estas ovejas, ¿qué han hecho? Jehová Dios mío, sea ahora tu mano contra mí, y contra la casa de mi padre, y no venga la peste sobre tu pueblo.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

17 David le dijo a Dios: «¡Soy yo quien pidió el censo! ¡Soy yo el que pecó e hizo el mal! Pero estas personas son tan inocentes como ovejas, ¿qué han hecho? Oh Señor mi Dios, que tu enojo caiga sobre mí y mi familia, pero no destruyas a tu pueblo».

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

17 Y David dijo a Yavé: 'Yo fui quien ordenó hacer el censo del pueblo. Yo fui quien pequé; yo cometí el mal; pero estas ovejas ¿qué culpa tienen? Oh Yavé, Dios mío, caiga tu mano sobre mí, y sobre la familia de mi padre, pero que no haya plaga en tu pueblo.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

17 y dijo David a Ha-’Elohim: ¿No fui yo el que hizo contar el pueblo? Yo mismo soy el que ha pecado, y yo soy el que ha obrado perversamente; pero estas ovejas, ¿qué han hecho? ¡Oh YHVH, Dios mío, sea ahora tu mano contra mí y contra la casa de mi padre, pero no venga la peste sobre tu pueblo!

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

17 Y David dijo a Dios: 'Yo, yo fui quien pecó; fui yo quien delinquió. Pero este rebaño ¿qué ha hecho? ¡Yahveh, Dios mío, descarga tu mano sobre mí y sobre la casa de mi padre, pero no haya mortandad en tu pueblo!'.

Gade chapit la Kopi




1 Crónicas 21:17
20 Referans Kwoze  

»Por eso, permita usted que yo me quede como esclavo suyo en lugar de mi hermano menor y que él regrese con sus hermanos.


Por eso la espada jamás se apartará de tu familia, pues me despreciaste al tomar la esposa de Urías el hitita para hacerla tu mujer”.


Una vez más, la ira del Señor se encendió contra Israel, así que el Señor incitó a David contra el pueblo al decirle: «Haz un censo de Israel y de Judá».


David, al ver que el ángel destruía a la gente, dijo al Señor: «¿Qué culpa tienen estas ovejas? ¡Soy yo el que ha pecado! ¡Soy yo el que ha hecho mal! ¡Descarga tu mano sobre mí y sobre mi familia!».


»Pues bien, dile a mi siervo David que así dice el Señor de los Ejércitos: “Yo te saqué del redil para que, en vez de cuidar ovejas, gobernaras a mi pueblo Israel.


Ante esto, Micaías concedió: —Vi a todo Israel esparcido por las colinas como ovejas sin pastor. Y el Señor dijo: “Esta gente no tiene amo. ¡Que cada cual se vaya a su casa en paz!”.


Entonces David dijo a Dios: «He cometido un pecado muy grande al hacer este censo. He actuado como un necio. Yo te ruego que perdones la maldad de tu siervo».


Nos has entregado para que nos devoren como ovejas nos has dispersado entre las naciones.


Dios mío, Dios de mi salvación, líbrame de derramar sangre y mi lengua alabará tu justicia.


Contra ti he pecado, solo contra ti, y he hecho lo que es malo ante tus ojos; por eso, tu sentencia es justa y tu juicio, irreprochable.


¿Por qué, oh Dios, nos has rechazado para siempre? ¿Por qué se ha encendido tu ira contra las ovejas de tu prado?


No te postres delante de ellos ni los adores. Yo, el Señor tu Dios, soy un Dios celoso. Cuando los padres son malvados y me odian, yo castigo a sus hijos hasta la tercera y cuarta generación.


Cuando yo te perdone por todo lo que has hecho, tú te acordarás de tu maldad, te avergonzarás y en tu humillación no volverás a jactarte, afirma el Señor y Dios”».


—Tómenme y láncenme al mar, verán que el mar se calmará —les respondió—. Yo sé bien que por mi culpa se ha desatado sobre ustedes esta terrible tormenta.


Desearía yo mismo ser maldecido y separado de Cristo por el bien de mis hermanos, los de mi propio pueblo,


¿Por qué insisten en darle la espalda al Señor? »¡Si hoy se rebelan contra él, mañana su ira se descargará sobre todo Israel!


En esto conocemos lo que es el amor: en que Jesucristo entregó su vida por nosotros. Así también nosotros debemos entregar la vida por nuestros hermanos.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite