Sofonías 3:15 - La Palabra (versión española)

¹⁵ El Señor ha alejado a tus enemigos, ha revocado plenamente tu condena. El Señor, rey de Israel, está contigo: ningún mal has de temer.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹⁵ Jehová ha apartado tus juicios, ha echado fuera tus enemigos; Jehová es Rey de Israel en medio de ti; nunca más verás el mal.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁵ Pues el Señor quitará su mano de juicio y dispersará a los ejércitos de tus enemigos. ¡El Señor mismo, el Rey de Israel, vivirá en medio de ti! Por fin, se habrán terminado tus aflicciones y nunca jamás temerás el desastre.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁵ Pues Yavé ha cambiado su suerte, ha alejado de ti a tus enemigos. No tendrás que temer desgracia alguna, pues en medio de ti está Yavé, rey de Israel.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁵ YHVH ha apartado tus juicios,° Ha echado fuera tu enemigo. YHVH, el Rey de Israel está en medio de ti. ¡Nunca más temerás el mal!

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁵ Yahveh ha retirado la sentencia contra ti, ha expulsado a tus enemigos. Yahveh, rey de Israel, está contigo, ya no tienes que temer mal alguno.

Sofonías 3:15 Referans Kwoze

Génesis 30:23

Raquel quedó embarazada y dio a luz un hijo. Entonces dijo: —Dios ha borrado mi desgracia.

Salmos 149:2

Que Israel se regocije en su creador, que los hijos de Sion se gocen en su rey.

Salmos 19:9

venerar al Señor comunica santidad, es algo que permanece para siempre; los juicios del Señor son verdad, todos ellos son justos.

Salmos 85:3

has contenido toda tu furia, has calmado el ardor de tu ira.

Isaías 12:6

Gritad, vitoread, habitantes de Sion, que es grande entre vosotros el Santo de Israel.

Isaías 25:8

Destruirá para siempre a la muerte, el Señor Dios enjugará el llanto que cubre los rostros, barrerá la afrenta de su pueblo en toda la superficie del país. Lo ha dicho el Señor.

Isaías 33:22

Pues el Señor nos gobierna y da leyes, el Señor es nuestro rey victorioso.

Isaías 35:10

Volverán los rescatados del Señor y entrarán con cánticos en Sion: encabezados por eterna alegría, seguidos de fiesta y de gozo; penas y suspiros huirán.

Isaías 51:22

Así dice tu Señor, tu Dios, defensor de su pueblo: Voy a retirar de tu mano la copa que aturde; no volverás a beber el cáliz de mi cólera.

Isaías 52:9

Cantad a coro, ruinas de Jerusalén, que el Señor se compadece de su pueblo, que ha rescatado a Jerusalén.

Isaías 54:14

tu bienestar estará asegurado. Alejada de la angustia, nada temerás; el terror no se te acercará.

Isaías 60:18

Ya no habrá violencia en tu tierra, ni exterminio ni destrucción dentro de tus fronteras; llamarás a tu muralla «Victoria» y dirás a tus puertas «Alabanza».

Isaías 65:19

Saltaré de júbilo por Jerusalén, sentiré alegría por mi pueblo; no se oirán llantos en ella, ni gritos pidiendo socorro.

Jeremías 8:19

«¿No está el Señor en Sion? ¿No está su rey en ella?». «¿Por qué me irritaron con sus ídolos, con esas naderías extranjeras?».

Ezequiel 35:10

Por haber dicho «Las dos naciones, los dos países van a ser míos, vamos a apoderarnos de ellos», siendo así que el Señor estaba allí,

Ezequiel 36:15

No permitiré que se vuelvan a oír los ultrajes que te dirigen las naciones ni que tengas que soportar los insultos de los pueblos; tampoco tu nación se quedará sin hijos —oráculo del Señor Dios.

Ezequiel 39:29

Y ya no los privaré de mi presencia, una vez que derrame mi espíritu sobre Israel. —Oráculo del Señor Dios.

Ezequiel 48:35

Por tanto, el perímetro medirá nueve mil metros. Y, de ahora en adelante, la ciudad se llamará: «El Señor está allí».

Amós 9:15

Yo los plantaré en su tierra y jamás volverán a ser arrancados de esa tierra que yo les regalé, —dice el Señor, tu Dios.

Miqueas 7:10

Lo contemplará mi enemiga, la que decía: «¿Dónde está tu Dios?», y quedará cubierta de vergüenza. Y yo me alegraré al verla pisoteada como si fuera barro de las calles.

Habacuc 2:17

Has derramado sangre humana, has colmado de violencia al país, a las ciudades y a sus habitantes; ahora la violencia hecha al Líbano caerá implacable sobre ti, bestias feroces te destrozarán.

Habacuc 2:8

Has expoliado a muchas naciones, has derramado sangre humana, has colmado de violencia al país, a las ciudades y a sus habitantes; ahora todos esos pueblos vendrán a expoliarte a ti.

Sofonías 3:17

El Señor, tu Dios, está contigo; él es poderoso y salva. Se regocija por ti con alegría, su amor te renovará, salta de júbilo por ti.

Sofonías 3:5

Pero el Señor está libre de toda iniquidad y hace justicia en medio de ella; cada mañana sin falta dicta sentencia al despuntar el día. Aun así, el inicuo no se avergüenza.

Zacarías 12:3

Aquel día convertiré a Jerusalén en una piedra que ninguna nación podrá levantar; cualquiera que intente levantarla quedará destrozado. Todas las naciones de la tierra se aliarán contra ella.

Zacarías 14:11

Habitarán en Jerusalén sin que se la vuelva a consagrar al exterminio, y vivirán seguros en ella.

Zacarías 9:9

Salta de alegría, Sion; grita jubilosa, Jerusalén, porque ya llega tu rey, justo y victorioso, humilde y montado sobre un asno, sobre un borrico, retoño de asna.

Juan 1:49

Natanael exclamó: —Maestro, tú eres el Hijo de Dios, tú eres el rey de Israel.

Juan 12:15

No temas, Jerusalén; mira, tu rey viene a ti montado sobre un asno.

Juan 19:19

Pilato mandó poner sobre la cruz un letrero con esta inscripción: «Jesús de Nazaret, el rey de los judíos».

Juan 5:30

Yo no puedo hacer nada por mi propia cuenta. Conforme el Padre me dicta, así juzgo. Mi juicio es justo, porque no pretendo actuar según mis deseos, sino según los deseos del que me ha enviado.

Apocalipsis 12:10

Y oí en el cielo una voz poderosa que decía: —Ya está aquí la salvación, el poder y el reino de nuestro Dios; ya está aquí la soberanía de su Cristo. Ha sido reducido a la impotencia el que día y noche acusaba a nuestros hermanos delante de nuestro Dios.

Apocalipsis 18:20

¡Alégrate, cielo, al contemplarla, y vosotros también, los consagrados a Dios, los apóstoles y los profetas, porque Dios ha vengado en ella vuestra causa!

Apocalipsis 19:16

Y escrito en el manto y sobre el muslo tiene este título: «Rey de reyes y Señor de señores».

Apocalipsis 7:15

Por eso están ante el trono de Dios, rindiéndole culto día y noche en su Templo; y el que está sentado en el trono los protege.