Proverbios 12:1 - La Palabra (versión española)

¹ Quien ama la educación ama el saber, quien odia la corrección es un estúpido.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹ El que ama la instrucción ama la sabiduría; Mas el que aborrece la reprensión es ignorante.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹ Para aprender, hay que amar la disciplina; es tonto despreciar la corrección.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹ El que acepta que lo corrijan ama el saber; el que aborrece la reprensión es un tonto.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹ El que ama la corrección ama el conocimiento, Pero el que aborrece la reprensión es necio.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹ Quien ama la instrucción ama la ciencia, quien odia la reprensión es necio.

Proverbios 12:1 Referans Kwoze

Salmos 119:27

Enséñame la senda de tus preceptos, que yo meditaré tus maravillas.

Salmos 141:5

Que el justo por amor me corrija y me reprenda, que el aceite del malvado no perfume mi cabeza, que mi oración se alce frente a sus maldades.

Salmos 32:9

No seáis como caballos o mulos que nada entienden: con el freno y las riendas hay que dominar su brío, pues de otro modo no se acercarán a ti.

Salmos 50:17

tú que odias la instrucción, tú que desprecias mis palabras?

Salmos 92:6

El ignorante nada sabe, el necio no entiende nada de esto:

Proverbios 10:8

La persona sensata acepta órdenes, labios alocados llevan a la ruina.

Proverbios 11:31

Si el justo recibe su paga en la tierra, ¡cuánto más el malvado y el pecador!

Proverbios 12:2

El Señor favorece al que es bueno y condena al malintencionado.

Proverbios 15:10

Quien abandona su senda sufrirá escarmiento, el que odia la corrección morirá.

Proverbios 18:1

El solitario persigue su interés, cualquier consejo lo enfada.

Proverbios 30:2

Nadie hay más estúpido que yo, no tengo inteligencia humana.

Proverbios 8:17

Yo amo a los que me aman y los que me buscan me encuentran.

Proverbios 8:32

Y ahora, hijos, escuchadme: felices quienes siguen mis caminos.

Proverbios 8:36

Mas quien me ofende, se daña a sí mismo; los que me odian, aman la muerte».

Isaías 1:3

El buey conoce a su dueño, el asno, el pesebre del amo; pero Israel no conoce, mi pueblo no entiende.

Levítico 13:10

El sacerdote lo examinará, y si aparece un tumor blancuzco en la piel, si ha cambiado el color del pelo y se descubre la carne viva,

2 Tesalonicenses 2:10

Con su gran maldad engañará a quienes están en camino de perdición al no haber querido hacer suyo el amor a la verdad que había de salvarlos.