Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Números 24:16 - La Palabra (versión española)

16 oráculo del que oye las palabras de Dios y recibe visiones del Altísimo, del que cae en éxtasis con ojos abiertos.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

16 Dijo el que oyó los dichos de Jehová, Y el que sabe la ciencia del Altísimo, El que vio la visión del Omnipotente; Caído, pero abiertos los ojos:

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

16 el mensaje del que oye las palabras de Dios, del que tiene conocimiento dado por el Altísimo, del que ve una visión que proviene del Todopoderoso, y se inclina con los ojos abiertos:

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

16 oráculo del que escucha las palabras de Dios y que posee la ciencia del Altísimo, que ve lo que el Dios de la Estepa le deja ver, que se postra, y Dios le abre los ojos.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

16 Oráculo del que oye los dichos de Dios, Que conoce la ciencia de ’Elyón,° Y contempla las visiones de Shadday.° Caído, pero con ojos abiertos:

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

16 oráculo del que oye las palabras de Dios, del que conoce la ciencia del Altísimo; del que ve la visión de Sadday, del que, al caer, se le abren los ojos.

Gade chapit la Kopi




Números 24:16
9 Referans Kwoze  

Y Melquisedec, rey de Salem y sacerdote del Dios Altísimo, le ofreció pan y vino,


Cuando Abrán tenía noventa y nueve años se le apareció el Señor y le dijo: —Yo soy el Todopoderoso. Tenme presente en tu vida y vive rectamente.


Entonces Balaán recitó este poema: Oráculo de Balaán hijo de Beor, oráculo del hombre de ojos abiertos,


Lo que veo, no sucederá enseguida; lo que contemplo, no está cercano: una estrella sale de Jacob, un rey surge en Israel que aplastará las sienes de Moab, el cráneo de todos los hijos de Set.


y recitó este poema: Oráculo de Balaán hijo de Beor, oráculo del hombre de ojos abiertos,


oráculo del que oye las palabras de Dios y recibe visiones del Altísimo, del que cae en éxtasis con ojos abiertos.


¿De qué me sirve profetizar, penetrar todos los secretos y poseer la más profunda ciencia? ¿De qué me vale tener toda la fe que se precisa para mover montañas? Si me falta el amor, no soy nada.


En cuanto a la carne ofrecida en sacrificio a los ídolos, todos conocemos el modo de proceder. Pero el conocimiento envanece; solo el amor es verdaderamente provechoso.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite