Mateo 15:18 - La Palabra (versión española)

¹⁸ En cambio, lo que sale de la boca procede del corazón, y eso es lo que hace impura a la persona.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹⁸ Pero lo que sale de la boca, del corazón sale; y esto contamina al hombre.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁸ pero las palabras que ustedes dicen provienen del corazón; eso es lo que los contamina.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁸ En cambio lo que sale de la boca procede del corazón, y eso es lo que hace impura a la persona.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁸ Pero las cosas que salen° de la boca° provienen del corazón, y ésas contaminan al hombre.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁸ Pero lo que sale de la boca procede del corazón, y esto sí que contamina al hombre.

Mateo 15:18 Referans Kwoze

Salmos 36:3

Son sus palabras maldad y mentira, no quiere ser sensato ni obrar bien.

Proverbios 10:32

Los labios del justo procuran placer; la boca del malvado, perversión.

Proverbios 15:2

Lengua de sabios perfecciona el saber, boca de necios esparce necedad.

Proverbios 15:28

La mente del justo medita sus respuestas, la boca del malvado esparce maldades.

Proverbios 4:23

Vigila atentamente tu interior, pues de él brotan fuentes de vida.

Proverbios 6:12

El perverso y malhechor camina con gesto torcido,

Mateo 12:34

¡Hijos de víbora! ¿Cómo puede ser bueno lo que decís, si vosotros mismos sois malos? Porque la boca habla de lo que rebosa el corazón.

Mateo 15:11

lo que hace impura a una persona no es lo que entra por la boca. Lo que verdaderamente la hace impura es lo que sale de la boca.

Mateo 15:17

¿No comprendéis que todo lo que entra por la boca pasa al vientre y va a parar a la letrina?

Marcos 7:20

Y añadió: —Lo que sale del interior, eso es lo que hace impura a una persona;

Lucas 19:22

El rey le contestó: «Eres un mal administrador, y por tus propias palabras te condeno. Si sabías que yo soy un hombre duro, que pretendo tomar lo que no he depositado y cosechar lo que no he sembrado,

1 Samuel 24:13

Que el Señor sea nuestro juez y que salga en mi defensa ante ti; pero yo no levantaré mi mano contra ti.