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Levítico 26:20 - La Palabra (versión española)

20 Se agotará vuestra fuerza en vano, pues la tierra no dará su cosecha ni los árboles del país darán su fruto.

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Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

20 Vuestra fuerza se consumirá en vano, porque vuestra tierra no dará su producto, y los árboles de la tierra no darán su fruto.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

20 Todo su trabajo será en vano, porque la tierra no dará cosechas y los árboles no producirán fruto.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

20 Sus esfuerzos se perderán, su tierra no dará sus productos ni los árboles darán sus frutos.

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La Biblia Textual 3a Edicion

20 Vuestras fuerzas se consumirán en vano, vuestro suelo no dará su producto, y el árbol de la tierra no dará su fruto.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

20 Vuestro esfuerzo se consumirá en vano: vuestras tierras ya no darán más sus cosechas y los árboles del campo no darán sus frutos.

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Levítico 26:20
21 Referans Kwoze  

Aunque labres la tierra, no te volverá a dar sus frutos. Andarás por el mundo errante y vagabundo.


Elías marchó a presentarse a Ajab. En Samaría había un hambre atroz.


¡que en vez de trigo produzcan espinas; en vez de cebada, ortigas! Fin de las palabras de Job.


la tierra fértil en tierra estéril, por la maldad de quienes la habitan.


Si el Señor no construye la casa, en vano se afanan sus constructores; si el Señor no protege la ciudad, en vano vigila el centinela.


Pues olvidaste a tu Dios salvador, no te acordaste de tu Roca inexpugnable. Y plantabas parterres exóticos, injertabas esquejes importados.


El mismo día los plantabas y crecían, de mañana germinaba la semilla. Pero un día aciago se pierde la cosecha: ¡un sufrimiento irremediable!


Pero yo pensaba: «En vano he trabajado, en viento y por nada he malgastado mis fuerzas»; sin embargo, mi causa la llevaba el Señor, mi recompensa dependía de mi Dios.


Sembraron trigo, cosecharon cardos; acabaron cansados sin sacar provecho; quedaron decepcionados de su cosecha, por la cólera ardiente del Señor.


Por eso, volveré a recoger mi trigo a su tiempo, mi vino nuevo en su sazón, y le quitaré mi lana y mi lino que le di para cubrir su desnudez.


yo os daré la lluvia a su tiempo, la tierra dará sus productos y los árboles del campo darán su fruto.


¿No ha decidido el Señor del universo que el fuego consuma el trabajo de los pueblos, y que las naciones se fatiguen en vano?


venían a un montón de grano para sacar veinte medidas y solo había diez; venían al lagar para sacar cincuenta medidas y solo había veinte.


Yo planté y Apolo regó, pero fue Dios quien hizo crecer.


Mucho me temo que mis sudores entre vosotros hayan sido baldíos.


porque entonces se encenderá la ira del Señor contra vosotros, cerrará los cielos y no caerá más lluvia; la tierra no dará más frutos y vosotros no tardaréis en desaparecer de esa tierra fértil que os da el Señor.


Malditos serán el fruto de tus entrañas, y el fruto de tu tierra, las crías de tu ganado, las terneras de tus manadas y las crías de tus rebaños.


¡Enjambres de langosta devorarán todos los árboles y las cosechas de tu tierra!


Se ha encendido el fuego de mi ira, que quema hasta lo profundo del abismo; devorará la tierra y sus cosechas, y consumirá la raíz de las montañas.


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