Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Levítico 11:44 - La Palabra (versión española)

44 Yo, el Señor, soy vuestro Dios; vosotros, por tanto, debéis santificaros y ser santos, porque yo soy santo; así que no os contaminéis con ningún animal que se arrastre sobre la tierra.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

44 Porque yo soy Jehová vuestro Dios; vosotros por tanto os santificaréis, y seréis santos, porque yo soy santo; así que no contaminéis vuestras personas con ningún animal que se arrastre sobre la tierra.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

44 Pues yo soy el Señor tu Dios. Debes consagrarte y ser santo, porque yo soy santo. Así que no te contamines al tocar cualquiera de estos animales pequeños que corren por el suelo.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

44 Porque yo soy Yavé, Dios de ustedes; santifíquense y sean santos, pues yo soy Santo. No se hagan impuros con ninguno de esos reptiles que se arrastran por el suelo,

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

44 porque Yo soy YHVH vuestro Dios. Vosotros, por tanto, os santificaréis y seréis santos, porque Yo soy santo,° así que no os contaminaréis con ningún reptil que se arrastra sobre la tierra,

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

44 Por ser yo, Yahveh, vuestro Dios, debéis vosotros santificaros y ser santos, porque yo soy santo. No os contaminéis, pues, con ninguno de los reptiles que se arrastran sobre la tierra.

Gade chapit la Kopi




Levítico 11:44
34 Referans Kwoze  

Alabad al Señor nuestro Dios, postraos ante el estrado de sus pies: ¡Él es santo!


Alabad al Señor nuestro Dios, postraos ante su santo monte, porque santo es el Señor nuestro Dios.


—He oído las murmuraciones de los israelitas. Ahora diles: «Al caer la tarde comeréis carne, y por la mañana os saciaréis de pan». Así reconoceréis que yo soy el Señor vuestro Dios.


Y el Señor le dijo: —Vuelve con el pueblo, purifícalos hoy y mañana; que laven sus ropas


seréis para mí un reino de sacerdotes, una nación consagrada. Esto es lo que has de decir a los israelitas.


—Yo soy el Señor, tu Dios, el que te libró de la esclavitud de Egipto.


Vosotros seréis un pueblo consagrado a mí. No comáis carne de animal despedazado en el campo; arrojádsela a los perros.


Daréis culto al Señor vuestro Dios, y él bendecirá tu alimento y tu bebida. Yo mantendré alejadas de ti las enfermedades,


Os tomaré para que seáis mi pueblo, y yo seré vuestro Dios; así reconoceréis que yo soy el Señor vuestro Dios, el que os rescató de la opresión egipcia.


Pues yo soy el Señor, tu Dios, el Santo de Israel, tu salvador. Entregué a Egipto para rescatarte, a Etiopía y Sabá en tu lugar,


Yo soy el Señor, tu Dios, que agito el mar y braman sus olas; mi nombre es Señor del universo.


Moisés dijo a Aarón: —Esto es lo que había decretado el Señor, cuando dijo: «Mostraré mi santidad a los que se acercan a mí, y en presencia de todo el pueblo seré glorificado». Aarón, por su parte, permaneció callado.


No os hagáis, pues, abominables a causa de ningún animal que se arrastre por la tierra, ni os contaminéis con ellos, ni contraigáis impureza a causa de ellos.


—Habla a los israelitas y diles: Yo soy el Señor, vuestro Dios.


Tampoco harás rebusco de tu viña ni recogerás los frutos caídos de tu huerto; los dejarás para el pobre y para el extranjero. Yo soy el Señor, vuestro Dios.


—Habla a todos los israelitas y diles: Sed santos, porque yo el Señor, vuestro Dios, soy santo.


Que cada uno respete a su madre y a su padre; y guardad mis días de descanso. Yo soy el Señor, vuestro Dios.


No deis culto a los ídolos ni os hagáis dioses de metal fundido. Yo soy el Señor, vuestro Dios.


Seréis para mí santos, porque yo, el Señor, soy santo y os he apartado de los demás pueblos para que seáis míos.


Santificaos, pues, y sed santos, porque yo soy el Señor, vuestro Dios.


Lo considerarás algo santo, pues él es quien ofrece el alimento para tu Dios. Considéralo santo porque yo, el Señor que os santifico, soy santo.


¿Caminarán dos juntos si no se han puesto de acuerdo?


De esta manera recordaréis y cumpliréis todos mis mandamientos, viviendo como consagrados a mí que soy vuestro Dios.


Vosotros tenéis que ser perfectos, como es perfecto vuestro Padre celestial.


porque tú eres un pueblo consagrado al Señor tu Dios, y a ti te ha elegido el Señor de entre todos los pueblos de la tierra para que seas el pueblo de su propiedad.


Pues no os ha llamado Dios a vivir en la impureza, sino como consagrados a él.


Entonces Josué dijo al pueblo: —No sé si seréis capaces de rendir culto al Señor, pues es un Dios santo, un Dios celoso, que no perdonará vuestras rebeldías ni vuestros pecados.


Pero vosotros sois raza elegida, sacerdocio real, nación consagrada, pueblo de su posesión, destinado a proclamar las grandezas de quien os llamó de las tinieblas a su luz maravillosa.


Ya casi da igual que el malo siga cometiendo maldades, que el manchado se manche aún más; pero que el bueno se haga mejor y que el consagrado a Dios se entregue aún más a él.


Nadie es santo como el Señor, nadie es fuerte como nuestro Dios, porque no hay otro como tú.


Entonces los habitantes de Bet Semes dijeron: —¿Quién podrá resistir ante el Señor, ante este Dios Santo? ¿A quién enviarla para quitárnosla de encima?


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite