Jueces 18:20 - La Palabra (versión española)

²⁰ Se alegró con ello el corazón del sacerdote, tomó el efod, los terafim y la imagen y se fue en medio de la tropa.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

²⁰ Y se alegró el corazón del sacerdote, el cual tomó el efod y los terafines y la imagen, y se fue en medio del pueblo.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²⁰ Entonces el joven sacerdote estuvo más que dispuesto a ir con ellos, y se llevó consigo el efod sagrado, los ídolos de familia y la imagen tallada.

Biblia Católica (Latinoamericana)

²⁰ El sacerdote se sintió muy feliz. Tomó el efod, los terafim, el ídolo y la estatua de bronce y se fue con todos esos hombres.

La Biblia Textual 3a Edicion

²⁰ Entonces el corazón del sacerdote se alegró y tomó el éfod y los terafines y la imagen esculpida, y se fue en medio de aquella gente.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²⁰ Se alegró el corazón del sacerdote, tomó el efod, los terafim y la estatua y se fue con ellos.

Jueces 18:20 Referans Kwoze

Proverbios 30:15

La sanguijuela tiene dos hijas y las dos se llaman «dame». Hay tres cosas insaciables y una cuarta que nunca se harta:

Isaías 56:11

son también perros voraces, que no conocen la hartura. Y hasta sus mismos pastores no saben ni entienden nada; todos siguen su camino, todos van tras su provecho:

Ezequiel 13:19

Me deshonráis ante mi pueblo por unos puñados de cebada y por unos trozos de pan, hasta el punto de dejar morir a las personas que no deben morir, y dejar con vida a las personas que no deben quedar con vida, engañando así a mi pueblo, que escucha vuestras mentiras.

Ezequiel 21:21

Ataca hacia atrás, a derecha, a izquierda, a lo que tengas enfrente.

Oseas 4:3

Por eso el país está de luto y todos sus habitantes languidecen; desaparecen las aves del cielo, las bestias del campo e incluso los peces del mar.

Levítico 26:1

No os fabriquéis ídolos, ni levantéis esculturas o estatuas, ni erijáis en vuestra tierra piedras conmemorativas para postraros ante ellas, porque yo soy el Señor, vuestro Dios.

Hechos 20:33

No he apetecido ni dinero ni vestidos de nadie.

Filipenses 3:19

Su paradero es la perdición; su dios, el vientre; su orgullo, aquello que debería avergonzarlos; su pensamiento, las cosas terrenas.

2 Pedro 2:3

En su ambición querrán, con palabras engañosas, utilizaros a vosotros como objetos de compraventa; pero hace tiempo que está dictada su condena, y pronta para consumarse su ruina.

Jueces 17:10

Micá le dijo: —Quédate en mi casa, y serás mi padre y mi sacerdote; yo te daré diez siclos de plata al año, vestido y comida.

Jueces 18:19

—Calla, cierra la boca y ven con nosotros. Serás nuestro padre y nuestro sacerdote. ¿O prefieres ser sacerdote de la casa de un particular a ser sacerdote de una tribu y de un clan de Israel?

Jueces 18:21

Reemprendieron el camino, colocando en cabeza a las mujeres, los niños, los rebaños y los objetos de valor.