Jeremías 6:24 - La Palabra (versión española)

²⁴ Al oír la noticia nos fallaron las fuerzas, llenos de angustia, con dolores de parturienta.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

²⁴ Su fama oímos, y nuestras manos se descoyuntaron; se apoderó de nosotros angustia, dolor como de mujer que está de parto.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²⁴ Hemos oído informes acerca del enemigo y las manos nos tiemblan de miedo. Punzadas de angustia se han apoderado de nosotros, como las de la mujer que está en trabajo de parto.

Biblia Católica (Latinoamericana)

²⁴ Hemos oído la noticia y se nos caen los brazos; la angustia y un dolor como de mujer que da a luz, nos asalta:'

La Biblia Textual 3a Edicion

²⁴ ¡Oímos su fama y se debilitan nuestras manos! ¡La angustia se apodera de nosotros, Y dolores, como de la que da a luz!

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²⁴ Cuando oímos la noticia desfallecieron nuestras manos; la angustia se apoderó de nosotros, dolor como de parturienta.

Jeremías 6:24 Referans Kwoze

Salmos 48:6

Los invadió un temblor cual dolor de parturienta,

Isaías 21:3

Por eso mis entrañas se llenan de espasmos; angustias me atenazan como de parturienta. Me inquieto al oírlo, al verlo me espanto;

Isaías 28:19

siempre que pase os arrollará, pues pasará mañana tras mañana, también por el día y por la noche. Será suficiente el terror para entender lo que os digo.

Jeremías 13:21

¿Qué vas a decir, Jerusalén, cuando ellos te castiguen, tú que les habías enseñado a tratarte como amigos? Seguro que te aprietan los dolores, igual que a mujer en parto.

Jeremías 22:23

Tú, que te asientas en el Líbano, que tienes tu nido entre cedros, ¡cómo gritarás cuando lleguen los dolores, cuando te retuerzas como una parturienta!

Jeremías 30:6

preguntad y averiguad si dan a luz los varones. ¿Por qué veo entonces a los varones con las manos en las caderas, lo mismo que parturientas, con el rostro demudado?

Jeremías 4:31

Oigo quejidos de parturienta, angustias como de primeriza: son quejidos y suspiros de Sion, que estira doliente sus brazos: ¡Ay de mí, que estoy agotada, me están quitando la vida!

Jeremías 48:41

Las ciudades han sido conquistadas, han caído las plazas fortificadas. Aquel día los soldados de Moab se sentirán como una parturienta.

Jeremías 49:24

Se acobarda Damasco, se vuelve y escapa, la atenaza el terror; se siente agarrada por angustias y dolores, como una parturienta.

Jeremías 50:43

Al oír la noticia, le flaquean las fuerzas al rey de Babilonia: lo atenaza la angustia, dolores de parturienta.

Ezequiel 7:17

Todas las manos se debilitan, todas las rodillas flaquean;

Daniel 5:9

El rey Baltasar se sintió turbado sobremanera y palideció todavía más; sus dignatarios estaban desconcertados.

Habacuc 3:16

Al oírlo se conmovieron mis entrañas; a su voz temblaron mis labios; mis huesos comenzaron a pudrirse y a vacilar mis piernas al andar. Pero yo aguardo sereno que llegue el día de la angustia sobre el pueblo que nos ha oprimido.

1 Tesalonicenses 5:3

Cuando la gente ande diciendo: «Todo es paz y seguridad», entonces justamente sobrevendrá la destrucción, como los dolores de parto a la mujer encinta, y no podrán librarse.