Jeremías 30:15 - La Palabra (versión española)

¹⁵ ¿Por qué gritas por tu herida? ¿Porque es tu llaga incurable? Si te traté de esa manera, ha sido a causa de tus muchas culpas, de la gran cantidad de tus pecados.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹⁵ ¿Por qué gritas a causa de tu quebrantamiento? Incurable es tu dolor, porque por la grandeza de tu iniquidad y por tus muchos pecados te he hecho esto.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁵ ¿Por qué te quejas de tu castigo, de esta herida que no tiene cura? He tenido que castigarte porque tus pecados son muchos y tu culpa es grande.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁵ ¿Por qué te quejas de tus heridas, y por qué tu dolor no se puede calmar? Por tu enorme culpa, por tus numerosos pecados te he hecho esto.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁵ ¿Por qué clamas con motivo de tu herida? Incurable es tu dolor; Por la grandeza de tu iniquidad y por tus muchos pecados te he hecho esto.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁵ ¿Por qué gritas por tu herida, por tu dolor desahuciado? Por tu gran iniquidad, porque fueron muchos tus pecados, te hice todo aquello.

Jeremías 30:15 Referans Kwoze

Esdras 9:13

Pues bien, después de todo lo que nos ha pasado a causa de nuestras malas acciones y de nuestra gran culpa, tú, ¡oh Dios nuestro!, no nos has castigado como merecían nuestras iniquidades, sino que nos has concedido ser este resto que ahora somos.

Job 34:29

Si Dios guarda silencio, ¿quién condenará al malvado? Si oculta su rostro, ¿quién podrá verlo? Pero él vigila a personas y países,

Job 34:6

¿Voy a mentir sobre mi caso? Me hieren de muerte sin culpa».

Salmos 107:17

Enloquecidos por su mala conducta, abatidos por sus faltas,

Isaías 1:6

de los pies a la cabeza nada sano queda en él: contusiones, cicatrices, heridas sin restañar, sin limpiar y sin vendar, sin suavizar con aceite.

Isaías 5:2

La cavó y la descantó, y plantó cepas selectas. Levantó en medio una torre y excavó en ella un lagar. Esperó que diera uvas, pero solo crio agraces.

Jeremías 11:13

Tenías tantos dioses como ciudades, Judá; y en cada una de las calles de Jerusalén construiste otros tantos altares para quemar incienso a Baal.

Jeremías 15:18

¿Por qué dura tanto mi dolor y mi herida se vuelve incurable, imposible de sanar? Te me has vuelto cauce engañoso, cuyas aguas son inconstantes.

Jeremías 2:19

Tu propia maldad te castigará, tu apostasía te va a escarmentar; recuerda bien que es malo y amargo abandonar al Señor, tu Dios, y no sentir respeto por mí —oráculo de Dios, Señor del universo.

Jeremías 30:12

Así dice el Señor: Tu fractura es incurable, tu herida está infectada;

Jeremías 30:14

Tus amantes te olvidaron, ya no andarán tras de ti. Te herí por medio del enemigo (sin duda un escarmiento cruel), a causa de tus muchas culpas, de la gran cantidad de tus pecados.

Jeremías 30:16

Pero los que te comen serán comidos, tus enemigos irán desterrados; tus saqueadores serán saqueados, los que te despojan, serán despojados.

Jeremías 30:17

Haré que se cierre tu herida, curaré todas tus llagas —oráculo del Señor. Te llamaban Repudiada, Sion, a quien nadie busca.

Jeremías 46:11

Sube a Galaad por bálsamo, doncella, capital de Egipto: es inútil que amontones remedios, pues tu herida no tiene cura.

Jeremías 6:13

Es que del pequeño al grande todos piensan en medrar; del profeta al sacerdote todos andan entre fraudes.

Lamentaciones 1:5

Sus enemigos la oprimen, sus adversarios prosperan, porque el Señor la ha afligido por sus copiosos pecados; sus niños van al destierro delante del enemigo.

Lamentaciones 2:13

¿Con quién puedo compararte, ciudad de Jerusalén? ¿Con qué ejemplo consolarte, virgen, hija de Sion? Un mar inmenso es tu herida: ¿quién te la podrá curar?

Lamentaciones 3:39

¿Por qué alguno se lamenta, si vive aunque haya pecado?

Lamentaciones 4:13

Por pecados de profetas y culpas de sacerdotes se derramó en su interior sangre de gente inocente.

Miqueas 1:9

Porque su herida es incurable, ha llegado hasta Judá, hasta la capital de mi pueblo, hasta alcanzar Jerusalén.

Miqueas 7:9

Tengo que soportar la ira del Señor hasta que se haga cargo de mi causa y restablezca mi derecho, pues he pecado contra el Señor. Él me llevará hasta la luz y me hará experimentar su victoria.

Nahúm 3:19

No hay alivio para tu desastre, tu herida es incurable. Todos los que oyen la noticia, aplauden tu desgracia, porque ¿quién no sufrió una y mil veces tu crueldad?