Jeremías 24:9 - La Palabra (versión española)9 Los pondré como escarmiento de todos los reinos de la tierra: serán motivo de insultos, refranes, sátiras y maldiciones en todos los lugares adonde los disperse. Gade chapit laPlis vèsyonBiblia Reina Valera 19609 Y los daré por escarnio y por mal a todos los reinos de la tierra; por infamia, por ejemplo, por refrán y por maldición a todos los lugares adonde yo los arroje. Gade chapit laBiblia Nueva Traducción Viviente9 Los haré objeto de horror y un símbolo de maldad para todas las naciones de la tierra. En todos los lugares donde yo los disperse, serán objetos de desprecio y de burla. Los maldecirán y se mofarán de ellos. Gade chapit laBiblia Católica (Latinoamericana)9 Serán motivo de espanto y de vergüenza para todos los reinos de la tierra; se reirán y se burlarán de ellos, serán como un ejemplo de maldición en todos los países adonde los echaré. Gade chapit laLa Biblia Textual 3a Edicion9 Los convertiré en espanto, en mal para todos los reinos de la tierra, oprobio y mal ejemplo, insulto y maldición, en todos los lugares adonde los arrojaré. Gade chapit laBiblia Serafín de Ausejo 19759 Los haré horror y desgracia para todos los reinos de la tierra; oprobio, proverbio, escarnio y maldición en todos los lugares adonde los habré expulsado, Gade chapit la |
Por eso, así dice el Señor: Por no haber hecho caso a mi deseo de que cada cual proclamase la liberación de su hermano y su prójimo, ahora voy a proclamar yo —oráculo del Señor— la liberación por la espada, la peste y el hambre, y voy a hacer de vosotros ejemplo de escarmiento para todos los reinos de la tierra.
Pues así dice el Señor del universo, Dios de Israel: Del mismo modo que se derramaron mi ira y mi cólera sobre los habitantes de Jerusalén, así se derramará mi cólera sobre vosotros cuando vayáis a Egipto. Os convertiréis en maldición y espanto, en objeto de execración e ignominia; y no volveréis a ver este lugar.
Aniquilaré al resto de Judá que dirigió su mirada hacia Egipto con el deseo de residir allí como forasteros; todos tendrán su fin en Egipto: serán víctimas de la espada y del hambre. Morirán pequeños y grandes, víctimas de la espada y del hambre; y se convertirán en maldición y espanto, en objeto de execración e ignominia.