Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Jeremías 21:10 - La Palabra (versión española)

10 Pues he dirigido mi mirada hacia esta ciudad para mal, no para bien —oráculo del Señor—; será entregada en manos del rey de Babilonia, que la pasará a fuego».

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

10 Porque mi rostro he puesto contra esta ciudad para mal, y no para bien, dice Jehová; en mano del rey de Babilonia será entregada, y la quemará a fuego.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

10 Pues he decidido traer desastre y no bien a esta ciudad, dice el Señor. Será entregada al rey de Babilonia, quien la reducirá a cenizas’”.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

10 Pues yo le he vuelto la cara a esta ciudad para su mal, no para su bien, dice Yavé. Caerá en manos del rey de Babilonia, que le prenderá fuego.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

10 Porque he puesto mi rostro contra esta ciudad para mal y no para bien, dice YHVH: será entregada en mano del rey de Babilonia, el cual la quemará con fuego°.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

10 Pues he dirigido mi rostro contra esta ciudad para mal y no para bien -oráculo de Yahveh-. Será entregada en mano del rey de Babilonia y la incendiará'.

Gade chapit la Kopi




Jeremías 21:10
26 Referans Kwoze  

Incendiaron el Templo, derribaron las murallas de Jerusalén, prendieron fuego a todos sus palacios y destruyeron todos sus objetos de valor.


el Señor se encara con los malhechores para borrar de la tierra su recuerdo.


Pero si no me escucháis y no santificáis el sábado, si seguís transportando y metiendo cargas por las puertas de Jerusalén en sábado, prenderé fuego a sus puertas, un fuego que consumirá los palacios de Jerusalén; y no se apagará».


haré con este Templo lo mismo que hice con Siló, y convertiré esta ciudad en fórmula de maldición para todas las naciones de la tierra.


Los caldeos vienen a luchar contra la ciudad, y las casas se llenarán de los cadáveres de las personas que he decidido aniquilar lleno de ira y de cólera, pues oculté mi rostro a esta ciudad a causa de todas sus maldades.


—Así dice el Señor, Dios de Israel: Di a Sedecías, rey de Judá, lo siguiente: Así dice el Señor: Voy a entregar esta ciudad en manos del rey de Babilonia, que la incendiará.


Ahora voy a dar la orden —oráculo del Señor— de que regresen a esta ciudad para atacarla, conquistarla y prenderle fuego, y convertiré las ciudades de Judá en tierra desolada sin habitantes.


Entonces Jeremías habló así a Sedecías: —Así dice el Señor del universo, Dios de Israel: Si sales y te entregas a los oficiales del rey de Babilonia, conservarás la vida; y además esta ciudad no será entregada a las llamas. Conservarás la vida junto con tu familia.


Pero si no sales y te entregas a los oficiales del rey de Babilonia, esta ciudad será entregada en manos de los caldeos y acabará siendo pasto de las llamas. Y tú no conseguirás escapar de sus manos.


Todas tus mujeres y tus hijos caerán en poder de los caldeos, y tú no podrás escapar. Caerás en manos del rey de Babilonia, y esta ciudad será incendiada.


Así dice el Señor: Esta ciudad será entregada en manos del ejército del rey de Babilonia, que la conquistará.


—Di a Ebedmélec, el cusita: Así dice el Señor del universo, Dios de Israel: Voy a hacer que se cumplan las palabras que pronuncié contra esta ciudad, palabras de desgracia, que no de ventura; y ese día serás testigo de su cumplimiento.


Los caldeos prendieron fuego al palacio real y a las viviendas de la ciudad, y derribaron las murallas de Jerusalén.


Por eso, así dice el Señor del universo, Dios de Israel: Estoy dirigiendo mi mirada hacia vosotros para mal, para extirpar a todos los de Judá.


Los estoy vigilando con intención de enviarles no beneficios, sino calamidades; haceros daño, no bien. Todos los judíos que viven en Egipto morirán víctimas de la espada y del hambre, hasta que yo acabe con ellos.


Incendió el Templo del Señor, el palacio real y todas las casas de Jerusalén, pegando fuego a todos los edificios principales.


pues pienso encararme con ellos. Han escapado del fuego, pero el fuego los consumirá; y reconocerán que yo soy el Señor cuando me encare con ellos.


Déjala vacía sobre las brasas, haz que se caliente a tope para que el bronce se ponga al rojo; así se desprenderá su roña y se consumirá su herrumbre.


Si un israelita o uno de los extranjeros residentes entre ellos, come cualquier clase de sangre, yo —el Señor— me enemistaré contra él y lo excluiré de su pueblo.


Me volveré contra vosotros, y sucumbiréis delante de vuestros enemigos; os dominarán quienes os aborrecen y huiréis sin que nadie os persiga.


enviaré contra Judá un fuego que devorará los palacios de Jerusalén.


si sus enemigos los llevan cautivos, haré que la espada los degüelle. ¡Para mal y no para bien los tendré siempre ante mi vista!


Sin embargo, las palabras y preceptos que encomendé transmitir por medio de mis siervos, los profetas, encontraron acogida en vuestros antepasados que se convirtieron reconociendo que el Señor del universo los había tratado de acuerdo con su proceder y sus acciones.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite