Isaías 61:2 - La Palabra (versión española)

² a proclamar un año de gracia del Señor y un día de venganza de parte de nuestro Dios; a dar consuelo a los que están de luto,

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

² a proclamar el año de la buena voluntad de Jehová, y el día de venganza del Dios nuestro; a consolar a todos los enlutados;

Biblia Nueva Traducción Viviente

² Él me ha enviado para anunciar a los que se lamentan que ha llegado el tiempo del favor del Señor junto con el día de la ira de Dios contra sus enemigos.

Biblia Católica (Latinoamericana)

² Para publicar un año feliz lleno de los favores de Yavé, y el día del desquite de nuestro Dios. Me envió para consolar a los que lloran

La Biblia Textual 3a Edicion

² A promulgar el año de gracia° de YHVH, Y el día de la venganza de nuestro Dios; A consolar a todos los que lloran,

Biblia Serafín de Ausejo 1975

² para proclamar el año de gracia de Yahveh, el día de venganza de nuestro Dios; para consolar a todos los que lloran,

Isaías 61:2 Referans Kwoze

Isaías 1:24

Por eso —oráculo del Señor, Dios del universo, del Poderoso de Israel—, pediré cuentas a mis adversarios, me vengaré de mis enemigos

Isaías 13:6

Lamentaos, se acerca el día del Señor, ya llega como azote del Todopoderoso.

Isaías 2:12

el día del Señor del universo, contra todo orgullo y arrogancia, contra toda altanería y altivez;

Isaías 25:8

Destruirá para siempre a la muerte, el Señor Dios enjugará el llanto que cubre los rostros, barrerá la afrenta de su pueblo en toda la superficie del país. Lo ha dicho el Señor.

Isaías 34:2

Que el Señor está airado con todos los pueblos, su cólera se dirige contra todos sus ejércitos; los va a exterminar y a entregar a la matanza.

Isaías 34:8

Que es el día de la venganza del Señor, el año del desquite por la causa de Sion;

Isaías 35:4

decid a los alocados: «Seguid firmes, no temáis, que viene vuestro Dios a vengaros, él os trae la recompensa y viene en persona a salvaros».

Isaías 40:1

Consolad, consolad a mi pueblo, dice vuestro Dios.

Isaías 49:8

Así dice el Señor: Te he respondido en el momento adecuado, te he auxiliado el día de la victoria; te formo, te convierto en alianza del pueblo, para que restaures el país y repartas heredades devastadas;

Isaías 51:12

Yo soy, yo, quien os consuela. ¿Por qué has de temer a un simple mortal, a alguien que se consume como hierba?

Isaías 57:18

yo soy testigo de sus andanzas. Pero lo sanaré compadecido, lo recompensaré con consuelos; y a los que hacen duelo con él

Isaías 58:5

¿Creéis que es este el ayuno que deseo cuando uno decide mortificarse: que mueva su cabeza como un junco, que se acueste sobre saco y ceniza? ¿A esto llamáis ayuno, día agradable al Señor?

Isaías 60:10

Extranjeros levantarán tus muros, sus reyes estarán a tu servicio; cierto que te herí en mi cólera, pero ahora te quiero complacido.

Isaías 66:14

Al verlo, se alegrará vuestro corazón, florecerán vuestros huesos como prado. El Señor mostrará su poder a sus siervos, y lanzará su cólera contra sus enemigos.

Jeremías 31:13

Las muchachas gozarán bailando, junto con jóvenes y adultos; cambiaré su duelo en alegría, los consolaré, alegraré sus penas.

Jeremías 46:10

Pero es el día de Dios, Señor del universo, día de venganza, contra sus enemigos. La espada devora hasta hartarse, hasta quedar ahíta de su sangre; pues celebra un banquete Dios, Señor del universo, en tierras del norte, junto al Éufrates.

Miqueas 3:8

Pero yo estoy lleno de valor, de espíritu divino, justicia y fortaleza, para reprochar a Jacob sus crímenes y sus pecados a Israel.

Mateo 5:4

Felices los que están tristes, porque Dios mismo los consolará.

Lucas 4:19

y a proclamar un año en el que el Señor concederá su gracia.

Lucas 6:21

Felices vosotros los que ahora tenéis hambre, porque Dios os saciará. Felices vosotros los que ahora lloráis, porque después reiréis.

2 Corintios 6:2

Es Dios mismo quien dice: Tengo un tiempo propicio para escucharte, un día en que acudiré en tu ayuda para salvarte. Pues bien, este es el tiempo propicio, este es el día de la salvación.

1 Tesalonicenses 2:16

al impedirnos predicar a los paganos a fin de que se salven. Están así llenando permanentemente la medida de sus pecados; pero el castigo de Dios se ha abatido sobre ellos de forma definitiva.