Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Isaías 57:2 - La Palabra (versión española)

2 entrará en la paz; descansarán en su lecho los que proceden con honradez.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

2 Entrará en la paz; descansarán en sus lechos todos los que andan delante de Dios.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

2 Pues los que andan por el camino de la justicia descansarán en paz cuando mueran.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

2 descansan en paz.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

2 Para que entre en la paz, Y descanse en su lecho el que andaba en rectitud.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

2 y entra en la paz. Descansan en sus lechos los que van por el camino recto.

Gade chapit la Kopi




Isaías 57:2
19 Referans Kwoze  

Cuando Abrán tenía noventa y nueve años se le apareció el Señor y le dijo: —Yo soy el Todopoderoso. Tenme presente en tu vida y vive rectamente.


Fue enterrado en el sepulcro que se había hecho en la Ciudad de David, colocado en un lecho lleno de diversas clases de perfumes, elaborados por expertos perfumistas. Luego encendieron en su honor una enorme pira.


Allí acaba la agitación de los canallas, allí descansan los que están exhaustos.


Observa al bueno, mira al honrado, porque al pacífico le aguarda un mañana;


antes de que vuelva el polvo a la tierra, a lo que era, y el espíritu vuelva a Dios, que lo dio.


Los reyes de la tierra reposan con honor, cada cual en su morada.


El camino del justo es derecho, tú allanas la senda del justo.


Esto es lo que ha dicho el Señor: Paraos en los caminos y observad, preguntad por las sendas de antaño, por el buen camino: andad por él y así encontraréis reposo. Pero dijeron: «No iremos».


Se le ha preparado un lecho entre las víctimas; todo su ejército, el conjunto de los muertos a espada, yace ahora en torno a su lecho de muerte; todos son incircuncisos, víctimas de la espada, que llenaron de terror la tierra de los vivos, y soportan su deshonor con los que han bajado a la fosa.


En cuanto a ti, vete y descansa. Después, al final de los días, te levantarás para recibir tu recompensa.


El amo le contestó: «Está muy bien. Has sido un administrador honrado y fiel. Y como has sido fiel en lo poco, yo te pondré al frente de mucho más. Entra y participa en mi propia alegría».


Ambos esposos eran rectos delante de Dios, intachables en el cumplimiento de todos los mandatos y disposiciones del Señor.


Cuando el pobre murió, los ángeles lo llevaron al seno de Abrahán. Tiempo después murió también el rico, y fue enterrado.


Ahora, Señor, ya puedo morir en paz, porque has cumplido tu promesa.


Pero Jesús dijo a la mujer: —Tu fe te ha salvado. Vete en paz.


Sabemos, además, que aunque se desmorone esta tienda corporal que nos sirve de morada terrestre, Dios nos tiene preparada en el cielo una morada eterna, no construida por manos humanas.


Rebosamos confianza, a pesar de todo, y preferiríamos abandonar el cuerpo para ir a vivir junto al Señor.


Ambas cosas me presionan: por un lado, quiero morir y estar con Cristo, que es, con mucho, lo mejor;


Y oí una voz que decía desde el cielo: —Escribe esto: «Dichosos desde ahora los muertos que mueren en el Señor. El Espíritu mismo les asegura el descanso de sus fatigas, por cuanto sus buenas obras los acompañan».


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite