Isaías 54:3 - La Palabra (versión española)

³ pues vas a extenderte a derecha e izquierda: tus hijos heredarán naciones, repoblarán ciudades desiertas.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

³ Porque te extenderás a la mano derecha y a la mano izquierda; y tu descendencia heredará naciones, y habitará las ciudades asoladas.

Biblia Nueva Traducción Viviente

³ Pues pronto estarás llena a rebosar; tus descendientes ocuparán otras naciones y repoblarán las ciudades en ruinas.

Biblia Católica (Latinoamericana)

³ porque te extenderás a derecha y a izquierda. Tu descendencia conquistará las naciones y repoblará las ciudades desiertas.

La Biblia Textual 3a Edicion

³ Porque te extenderás hacia la derecha y hacia la izquierda, Y tu descendencia desposeerá las naciones, Y volverán a poblar ciudades desoladas.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³ que a derecha y a izquierda te extenderás, tu estirpe poseerá naciones, y ciudades desiertas poblará.

Isaías 54:3 Referans Kwoze

Génesis 26:22

Entonces Isaac se fue de allí y volvió a cavar otro pozo, pero esta vez ya no hubo disputas por él. A este pozo lo llamó Rejobot —es decir, «Espacios abiertos»—, pues se dijo: «El Señor nos ha dado espacios abiertos para que prosperemos en esta región».

Génesis 28:14

Tu descendencia será tan numerosa como el polvo de la tierra: te extenderás a oriente y a occidente, al norte y al sur. Por ti y tu descendencia todos los pueblos de la tierra serán benditos.

Génesis 49:10

No se apartará de Judá el cetro, ni el bastón de mando de entre sus rodillas, hasta que llegue aquel a quien le pertenece y a quien obedecerán los pueblos.

Isaías 14:1

El Señor se apiadará de Jacob, volverá a elegir a Israel; lo hará reposar en su tierra. A ellos se unirán forasteros, agregados a la casa de Jacob.

Isaías 14:2

Otros pueblos los irán recogiendo y los llevarán a su lugar; pero la casa de Israel después los poseerá como esclavos y esclavas en la tierra del Señor; capturarán a sus captores, dominarán a sus dominadores.

Isaías 26:15

Pero tú multiplicas el pueblo, lo multiplicas y demuestras tu poder, ensanchas las fronteras del país.

Isaías 45:14

Así dice el Señor: La riqueza de Egipto, el comercio de Etiopía y los sabeos, gente de elevada estatura, pasarán a ti y serán tuyos; tras de ti marcharán encadenados, ante ti se postrarán y dirán suplicantes: «En ti está Dios, y no hay otro, no hay ningún otro Dios».

Isaías 48:19

tu descendencia sería como la arena, los retoños de tu vientre como sus granos. No permitiré que sea aniquilado ni destruido tu nombre ante mí.

Isaías 49:12

Mirad, ya llegan de lejos: unos del norte y del oeste, otros del país de Siene.

Isaías 49:8

Así dice el Señor: Te he respondido en el momento adecuado, te he auxiliado el día de la victoria; te formo, te convierto en alianza del pueblo, para que restaures el país y repartas heredades devastadas;

Isaías 52:9

Cantad a coro, ruinas de Jerusalén, que el Señor se compadece de su pueblo, que ha rescatado a Jerusalén.

Isaías 53:10

el Señor quiso machacarlo con males. Por entregar su vida como ofrenda expiatoria, verá su descendencia, vivirá muchos años, por su mano triunfará el designio del Señor.

Isaías 55:5

Llamarás a un pueblo que no conoces, correrá a ti un pueblo que no te conoce, porque yo soy el Señor, tu Dios, el Santo de Israel, que te honra.

Daniel 7:27

Y el pueblo de los santos del Altísimo recibirá la soberanía, el poder y la gloria de todos los reinos que existen bajo el cielo. Su reino será eterno y todos los poderes le obedecerán y estarán a su servicio.

Romanos 10:18

Y yo pregunto: ¿Será que no han oído? ¡Por supuesto que sí! La voz de los mensajeros ha resonado en todo el mundo y sus palabras han llegado hasta el último rincón de la tierra.

Romanos 11:12

Y si su caída ha sido provechosa para el mundo, si su fracaso ha beneficiado a las demás naciones, el beneficio será mucho mayor cuando también ellos alcancen la plenitud.

Colosenses 1:23

Es necesario, sin embargo, que permanezcáis sólidamente firmes e inconmovibles en la fe y que no traicionéis la esperanza contenida en el evangelio que escuchasteis y que ha sido proclamado a todas las criaturas que se encuentran bajo el cielo, y del que yo, Pablo, me he convertido en servidor.