Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Hageo 2:4 - La Palabra (versión española)

4 Sin embargo, anímate Zorobabel —oráculo del Señor—, anímate sumo sacerdote Josué, hijo de Josadac, y que se anime toda la gente del país —oráculo del Señor—. Poned manos a la obra porque yo estoy con vosotros, dice el Señor del universo.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

4 Pues ahora, Zorobabel, esfuérzate, dice Jehová; esfuérzate también, Josué hijo de Josadac, sumo sacerdote; y cobrad ánimo, pueblo todo de la tierra, dice Jehová, y trabajad; porque yo estoy con vosotros, dice Jehová de los ejércitos.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

4 Sin embargo, ahora el Señor dice: Zorobabel, sé fuerte. Jesúa, hijo de Jehosadac, sumo sacerdote, sé fuerte. Ustedes que aún quedan en la tierra, sean fuertes. Así que ahora, ¡manos a la obra!, porque yo estoy con ustedes, dice el Señor de los Ejércitos Celestiales.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

4 Sin embargo, a ustedes les digo, Zorobabel, Josué y todos ustedes que son el pueblo del país, que no se desanimen. Pónganse a trabajar y yo estaré con ustedes, palabra de Yavé de los Ejércitos.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

4 Ahora pues, esfuérzate Zorobabel, dice YHVH; y esfuérzate también tú, Josué ben Josadac, sumo sacerdote, y esfuércese todo el pueblo de esta tierra, dice YHVH, y actuad, porque Yo estoy con vosotros, dice YHVH Sebaot.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

4 ¡Ánimo, pues, Zorobabel! -oráculo de Yahveh-. ¡Ánimo, Josué, hijo de Josadac, sumo sacerdote! ¡Ánimo, pueblo todo del país! -oráculo de Yahveh-. ¡Manos a la obra! Porque yo estoy con vosotros -oráculo de Yahveh Sebaot-,

Gade chapit la Kopi




Hageo 2:4
20 Referans Kwoze  

David iba haciéndose cada día más poderoso, pues el Señor, Dios del Universo estaba con él.


Tendrás éxito si procuras practicar los mandatos y normas que el Señor prescribió a Israel por medio de Moisés. ¡Ten ánimo y valor! ¡No temas ni te acobardes!


Luego David añadió a su hijo Salomón: —¡Ten valor y ánimo, y pon manos a la obra! No temas ni te acobardes, porque Dios, el Señor, mi Dios, te acompaña, y no te dejará ni abandonará hasta que culmines toda la obra del servicio del Templo.


Entre los descendientes de los sacerdotes que se habían casado con mujeres extranjeras, se encontraron los siguientes: De los descendientes de Josué, hijo de Josadac, y de sus hermanos: Maasías, Eliezer, Jarib y Guedalías,


Entonces Zorobabel, hijo de Salatiel, y Josué, hijo de Josadac, reanudaron en Jerusalén la construcción del Templo de Dios. Los acompañaban y ayudaban los profetas de Dios.


Dios le contestó: —Yo estaré contigo, y esta es la señal de que soy yo quien te envía: cuando hayas sacado de Egipto al pueblo, me adoraréis en este monte.


y Ageo, el enviado del Señor, transmitió este mensaje de parte del Señor: «Yo estoy con vosotros» —oráculo del Señor—.


Así dice el Señor del universo: —Cobrad ánimo los que oís las palabras que los profetas pronuncian estos días en que se echan los cimientos del Templo del Señor del universo.


Los discípulos salieron en todas direcciones a proclamar el mensaje. Y el Señor mismo los ayudaba y confirmaba el mensaje acompañándolo con señales milagrosas].


Posteriormente, los hijos de Jacob tuvieron envidia de José y lo vendieron como esclavo con destino a Egipto. Pero José gozaba de la protección de Dios


Estad alerta; manteneos firmes en la fe; portaos con valentía, sed modelo de fortaleza.


Solo me resta desear que os mantengáis fuertes, apoyados en el poder irresistible del Señor.


Y el Señor le dio a Josué, hijo de Nun, estas órdenes: —Sé fuerte y decidido, porque tú harás entrar a los israelitas a la tierra que juré darles. Yo estaré contigo.


Así pues, tú, hijo mío, mantente fuerte, apoyado en la gracia de Cristo Jesús.


Pero el Señor estuvo conmigo y me dio fuerzas para llevar a buen término el anuncio del mensaje, de modo que todos los paganos pudieron escucharlo. El Señor, que me libró de la boca del león,


Pórtate, pues, con fortaleza y valentía porque vas a ser tú quien darás a este pueblo la posesión de la tierra que juré dar a sus antepasados.


Te he mandado que seas fuerte y valiente. No tengas, pues, miedo ni te acobardes, porque el Señor tu Dios estará contigo dondequiera que vayas.


Cuando el Señor les suscitaba jueces, el Señor asistía al juez y, mientras este vivía, estaban a salvo de sus enemigos, porque el Señor se compadecía de los gemidos que proferían ante los que los maltrataban y oprimían.


Entonces uno de los servidores le dijo: —Yo conozco a un hijo de Jesé, el de Belén, que sabe tocar y que además es valiente, buen guerrero, elocuente, atractivo y el Señor está con él.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite