Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Génesis 30:30 - La Palabra (versión española)

30 lo poco que tenías antes de que yo viniera ha aumentado prodigiosamente, pues desde que llegué, el Señor te ha bendecido. Pero ya es hora de que también haga algo por mi propia familia.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

30 Porque poco tenías antes de mi venida, y ha crecido en gran número, y Jehová te ha bendecido con mi llegada; y ahora, ¿cuándo trabajaré también por mi propia casa?

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

30 En verdad tenías muy poco antes de que yo llegara, pero tu riqueza aumentó enormemente. El Señor te ha bendecido mediante todo lo que he hecho. ¿Pero y yo, qué? ¿Cuándo podré comenzar a mantener a mi propia familia?

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

30 Poco era lo que tenías antes de que yo llegara aquí; pero después creció enormemente y Yavé te ha bendecido. ¿Cuándo, pues, podré trabajar para mi propia casa?'

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

30 pues poco tenías antes de mi llegada, y ha aumentado mucho, y YHVH te ha bendecido con mi presencia.° Así que, ¿cuándo podré trabajar también por mi propia casa?

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

30 porque bien poco era lo que tú tenías antes de que yo llegara, pero se ha acrecentado considerablemente, y Yahveh te ha bendecido a mi paso. ¿No es hora de que haga yo algo también por mi casa?'.

Gade chapit la Kopi




Génesis 30:30
7 Referans Kwoze  

Entonces Jacob le dijo: —Tú bien sabes cómo te he servido y cómo le ha ido al ganado que te he cuidado;


Labán insistió: —¿Qué quieres que te dé? Jacob le respondió: —No tienes que darme nada. Si aceptas lo que te voy a proponer, volveré a pastorear tu ganado.


Con lo cual Jacob prosperó muchísimo: tenía criados y criadas, numerosos rebaños, y también camellos y asnos.


Hay un tiempo para buscar y un tiempo para perder; un tiempo para guardar y un tiempo para tirar.


Estoy a punto de haceros mi tercera visita y tampoco esta vez os seré gravoso, pues me interesáis vosotros, no vuestro dinero. Después de todo, corresponde a los padres ahorrar para los hijos, y no los hijos para los padres.


La tierra a la que te diriges para tomar posesión de ella no es como la tierra de Egipto, de la que salisteis; allí vosotros plantabais la semilla y teníais que regarla con la ayuda del pie, como se riegan las hortalizas del huerto.


Pues quien no mira por los suyos, especialmente por los de su casa, ha renegado de la fe y es peor que los infieles.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite