Gálatas 5:25 - La Palabra (versión española)

²⁵ Si, pues, vivimos animados por el Espíritu, actuemos conforme al Espíritu.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

²⁵ Si vivimos por el Espíritu, andemos también por el Espíritu.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²⁵ Ya que vivimos por el Espíritu, sigamos la guía del Espíritu en cada aspecto de nuestra vida.

Biblia Católica (Latinoamericana)

²⁵ Si ahora vivimos según el espíritu, dejémonos guiar por el Espíritu;'

La Biblia Textual 3a Edicion

²⁵ Ahora que vivimos por el Espíritu, andemos en el espíritu.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²⁵ Si vivimos por el Espíritu, caminemos también por el Espíritu.

Gálatas 5:25 Referans Kwoze

Juan 6:63

Es el espíritu el que da vida; la carne no sirve para nada. Las palabras que os he dicho son espíritu y vida.

Romanos 8:10

Pero si Cristo está en vosotros, aunque el cuerpo muera a causa del pecado, el espíritu vive en virtud del poder salvador de Dios.

Romanos 8:2

pues la ley del Espíritu que da vida en Cristo Jesús me ha liberado de la ley del pecado y de la muerte.

1 Corintios 15:45

La Escritura dice: Adán, el primer ser humano, fue creado como un ser dotado de vida; el último Adán, como un espíritu que da vida.

2 Corintios 3:6

Él fue quien nos capacitó para ser ministros de una alianza nueva, basada no en la letra de la ley, sino en la fuerza del Espíritu; y la letra de la ley es causa de muerte, mientras que el Espíritu lo es de vida.

Gálatas 5:16

Os exhorto, pues, a que viváis de acuerdo con las exigencias del Espíritu y así no os dejaréis arrastrar por desordenadas apetencias humanas.

Filipenses 3:3

¡Nosotros somos los auténticos circuncidados! ¡Nosotros los que ofrecemos un culto nacido del Espíritu divino! ¡Nosotros los que estamos orgullosos de Cristo Jesús y no hemos puesto en algo humano nuestra confianza!

1 Pedro 4:6

Por eso precisamente, también a los que ya murieron se les anunció el mensaje de salvación, a fin de que, juzgados como mortales, obtengan de Dios la vida del espíritu.

Apocalipsis 11:11

Pero al cabo de los tres días y medio, Dios los hizo revivir y los puso de nuevo en pie, para asombro y terror de quienes los contemplaban.