Éxodo 2:21 - La Palabra (versión española)

²¹ Moisés se quedó a vivir en casa de Reuel, el cual le dio a su hija Séfora por esposa.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

²¹ Y Moisés convino en morar con aquel varón; y él dio su hija Séfora por mujer a Moisés.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²¹ Moisés aceptó la invitación y se estableció allí con Reuel. Con el tiempo, Reuel le entregó a su hija Séfora por esposa.

Biblia Católica (Latinoamericana)

²¹ Moisés aceptó quedarse con aquel hombre, quien le dio por esposa a su hija Séfora.

La Biblia Textual 3a Edicion

²¹ Y Moisés aceptó habitar con aquel varón, y dio a Moisés su hija Séfora.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²¹ Moisés accedió a morar con aquel hombre, el cual le dio por mujer a su hija Séfora.

Éxodo 2:21 Referans Kwoze

Éxodo 2:10

Cuando el niño creció, se lo llevó a la hija del faraón, que lo adoptó como hijo suyo, y le puso el nombre de Moisés, diciendo: —«Yo lo saqué de las aguas».

Éxodo 2:20

Reuel continuó preguntando: —¿Y dónde está ese hombre? ¿Cómo habéis dejado que se marche? Salid e invitadlo a que se hospede aquí.

Éxodo 3:1

Moisés pastoreaba el rebaño de Jetró, su suegro, sacerdote de Madián. Conduciendo el rebaño a través del desierto, llegó al Horeb, el monte de Dios.

Éxodo 4:18

Moisés volvió a casa de su suegro Jetró, y le dijo: —Déjame ir a Egipto. Tengo que regresar adonde están mis hermanos, para ver si siguen vivos. Respondió Jetró: —Vete en paz.

Números 10:29

Moisés dijo a su suegro Jobab del clan madianita de Ragüel: —Nosotros partimos hacia la tierra que el Señor ha prometido darnos. Ven con nosotros y seremos generosos contigo, pues el Señor ha prometido ser generoso con Israel.

Números 12:1

Entonces María y Aarón criticaron a Moisés porque se había casado con una mujer cusita. Decían:

Hechos 7:29

Estas palabras hicieron que Moisés huyera y viviera exiliado en Madián, donde llegó a ser padre de dos hijos.

1 Timoteo 6:6

Y ciertamente la vida piadosa trae magníficos beneficios cuando uno se contenta con lo que tiene.

Hebreos 11:25

prefiriendo ser maltratado junto con el pueblo de Dios a disfrutar de los efímeros placeres del pecado.

Hebreos 13:5

Que la fiebre del dinero no se apodere de vosotros; contentaos con lo que tenéis, ya que es Dios mismo quien ha dicho: Nunca te abandonaré; jamás te dejaré solo.

Santiago 1:10

El rico, en cambio, que se precie de ser humilde, pues se desvanecerá como la flor de la hierba.