Esdras 5:5 - La Palabra (versión española)

⁵ Pero Dios protegía a los responsables de los judíos y no los obligaron a parar la obra hasta que Darío tratase el asunto y diera una respuesta sobre el particular.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

⁵ Mas los ojos de Dios estaban sobre los ancianos de los judíos, y no les hicieron cesar hasta que el asunto fuese llevado a Darío; y entonces respondieron por carta sobre esto.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁵ pero como Dios cuidaba a su pueblo, no pudieron impedir que los líderes judíos siguieran construyendo hasta que se enviara un informe a Darío y él comunicara su decisión al respecto.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁵ Pero Dios cuidaba a los ancianos de Judá; pues mientras se enviaba un informe a Darío y se aguardaba su respuesta no se los obligó a suspender el trabajo.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁵ Pero la mirada de Dios estaba sobre los ancianos judíos, y no los obligaron a interrumpir el trabajo hasta que el asunto fuera a Darío y éste diera instrucciones por carta.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁵ Pero la mirada de Dios velaba sobre los ancianos de los judíos, y no les obligaron a paralizar las obras mientras se consultaba a Darío y se esperaba respuesta escrita sobre el asunto.

Esdras 5:5 Referans Kwoze

2 Crónicas 16:9

El Señor recorre toda la tierra con su mirada para fortalecer a los que le son plenamente fieles. Pero tú, en esta ocasión, has perdido la cabeza. Por eso, a partir de ahora tendrás guerras.

Esdras 7:28

inclinando hacia él el favor del rey, de sus consejeros y de los altos dignatarios reales! Así que confortado por el Señor, mi Dios, de cuya protección gozaba, reuní a los principales de Israel para que regresaran conmigo.

Esdras 7:6

volvió de Babilonia. Era Esdras un escriba versado en la ley de Moisés otorgada por el Señor, Dios de Israel. El rey le concedía todo lo que pedía porque Esdras gozaba del favor del Señor.

Esdras 8:22

Me dio vergüenza pedir al rey tropa y caballerías que nos protegieran del enemigo durante el camino, pues habíamos dicho al rey: «Nuestro Dios protege bondadosamente a los que lo buscan, mientras que descarga su ira y poder contra los que lo abandonan».

Salmos 32:8

Yo te instruiré y te enseñaré el camino que debes seguir, te aconsejaré y pondré mis ojos en ti.

Salmos 33:18

La mirada del Señor está sobre los justos, sobre los que en su amor ponen su esperanza;

Salmos 34:15

La mirada del Señor está sobre los justos, sus oídos junto a su grito de socorro;

Salmos 76:10

Hasta el furor de los humanos te engrandece, los que escapan a tu cólera te sirven de corona.

Filipenses 1:28

No os dejéis, pues, intimidar por los enemigos; Dios ha dispuesto que lo que para ellos es señal de perdición, sea para vosotros señal de salvación.

1 Pedro 3:12

Pues los ojos del Señor se fijan en los buenos, y sus oídos atienden a sus ruegos. Rechaza, en cambio, el Señor a quienes practican el mal.