Daniel 5:13 - La Palabra (versión española)

¹³ Daniel fue traído de inmediato a la presencia del rey, que le preguntó: —¿Eres tú Daniel, uno de aquellos deportados que mi padre, el rey, trajo de Judá?

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹³ Entonces Daniel fue traído delante del rey. Y dijo el rey a Daniel: ¿Eres tú aquel Daniel de los hijos de la cautividad de Judá, que mi padre trajo de Judea?

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹³ Entonces trajeron a Daniel delante del rey y el rey le preguntó: —¿Eres tú ese Daniel, uno de los cautivos traídos de Judá por mi antecesor, el rey Nabucodonosor?

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹³ Trajeron pues a Daniel a la presencia del rey. El rey tomó la palabra y le dijo: '¿Eres tú Daniel, uno de los desterrados que mi padre trasladó desde Judea?'

La Biblia Textual 3a Edicion

¹³ Entonces Daniel fue conducido ante el rey. Y dijo el rey a Daniel: ¿Eres tú aquel Daniel de los hijos de la cautividad de Judá, que mi padre trajo de Judea?

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹³ Fue entonces llevado Daniel a la presencia del rey y el rey, tomando la palabra, le dijo a Daniel: '¿Eres tú Daniel, de los deportados de Judá, que el rey, mi padre, trajo de Judea?

Daniel 5:13 Referans Kwoze

Esdras 10:16

El resto de los repatriados actuaron conforme a lo acordado. Al respecto, junto con el sacerdote Esdras fueron designados nominalmente los jefes de las respectivas familias, y el día primero del décimo mes se sentaron a investigar el asunto.

Esdras 10:7

Corrieron entonces la voz por Judá y Jerusalén para que todos los que habían vuelto del exilio se congregaran en Jerusalén.

Esdras 4:1

Cuando los enemigos de Judá y Benjamín se enteraron de que los repatriados estaban construyendo un Templo al Señor, Dios de Israel,

Esdras 6:16

Los israelitas, los sacerdotes, los levitas y el resto de los repatriados dedicaron este Templo a Dios con alegría.

Daniel 1:1

El año tercero del reinado de Joaquín, rey de Judá, Nabucodonosor, rey de Babilonia, se dirigió a Jerusalén y la sitió.

Daniel 1:2

El Señor puso en sus manos a Joaquín, rey de Judá, junto con parte de los objetos del Templo de Dios. Se llevó estos objetos al país de Senar y los depositó en el tesoro del templo de su dios.

Daniel 1:21

Daniel permaneció allí hasta el año primero del reinado de Ciro.

Daniel 1:6

Entre aquellos jóvenes había unos que procedían de Judá, y se llamaban Daniel, Ananías, Misael y Azarías.

Daniel 2:25

Arioc llevó a Daniel sin pérdida de tiempo ante el rey, y le dijo: —He encontrado entre los deportados de Judá a uno que dice ser capaz de interpretar el sueño de su majestad.

Daniel 2:48

Después el rey honró a Daniel y le hizo muchos y magníficos regalos. Lo nombró gobernador de la provincia de Babilonia y jefe supremo de todos los sabios de Babilonia.

Daniel 5:11

pues tienes en tu reino a un hombre que participa del espíritu de los dioses santos. En vida de tu padre demostró tener una clarividencia, una inteligencia y una sabiduría propias de los dioses. El rey Nabucodonosor, tu padre, lo nombró jefe de los magos, adivinos, hechiceros y astrólogos.

Daniel 5:14

He oído decir que participas del espíritu de los dioses y que sobrepasas a todos en clarividencia, inteligencia y sabiduría.

Daniel 5:18

El Dios Altísimo, majestad, concedió a tu padre Nabucodonosor soberanía, poder, fama y honor.

Daniel 5:2

Cuando estaba aturdido por el vino, mandó traer las copas de oro y plata que su padre Nabucodonosor se había llevado del Templo de Jerusalén, para beber en ellas el propio rey, sus dignatarios, sus mujeres y sus concubinas.

Daniel 6:13

Acudieron de inmediato al rey y le recordaron el real decreto: —¿No has firmado un decreto ordenando que, durante treinta días, nadie rece a cualquier otro dios o ser humano, salvo a ti, majestad, so pena de ser arrojado al foso de los leones? El rey respondió: —Así es, y se trata de un decreto irrevocable, según la ley de los medos y de los persas.

Daniel 8:1

El año tercero del reinado de Baltasar, yo, Daniel, tuve una visión, aparte de la que había tenido anteriormente.

Daniel 8:27

Yo, Daniel, quedé debilitado y estuve enfermo durante unos días. Pasada ya mi postración, fui a ocuparme de los asuntos del rey. Sin embargo, la visión me tenía desconcertado, pues no acababa de entenderla.

Juan 7:1

Pasó algún tiempo, y Jesús seguía recorriendo Galilea. Evitaba andar por Judea, porque los judíos buscaban una ocasión para matarlo.

Juan 7:3

sus hermanos le dijeron: —Deberías salir de aquí e ir a Judea, para que tus seguidores puedan ver también allí las obras que haces.