Apocalipsis 21:7 - La Palabra (versión española)

⁷ Al vencedor le reservo esta herencia: yo seré su Dios y él será mi hijo.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

⁷ El que venciere heredará todas las cosas, y yo seré su Dios, y él será mi hijo.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁷ Los que salgan vencedores heredarán todas esas bendiciones, y yo seré su Dios, y ellos serán mis hijos.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁷ Esa será la herencia del vencedor: yo seré Dios para él y él será hijo para mí.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁷ El que venza heredará estas cosas, y le seré por Dios, y él me será por hijo.°

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁷ El que venza, heredará estas cosas. Y yo seré su Dios y él será mi hijo.

Apocalipsis 21:7 Referans Kwoze

Génesis 17:8

A ti y a los descendientes que te sucedan os daré en posesión perpetua la tierra que ahora recorres como inmigrante, toda la tierra de Canaán. Y yo seré su Dios.

2 Samuel 7:14

Yo seré su padre y él será mi hijo. Y si se porta mal, yo lo corregiré con mano dura según la costumbre humana,

Salmos 89:26

Él me dirá: “Tú eres mi padre, mi Dios, el refugio que me salva”.

Proverbios 3:35

Los sabios heredan honores, los necios cargan con la deshonra.

Isaías 65:9

Sacaré descendientes de Jacob, de Israel quien herede mis montes; los poseerán quienes yo elija, allí se instalarán mis siervos.

Zacarías 8:8

los traeré y habitarán Jerusalén; ellos serán mi pueblo y yo seré su Dios, fiel y salvador.

Mateo 19:29

Y todos los que hayan dejado casas, hermanos, hermanas, padre, madre, hijos o tierras por causa de mí, recibirán el ciento por uno de beneficio y la herencia de la vida eterna.

Mateo 25:21

El amo le contestó: «Está muy bien. Has sido un administrador honrado y fiel. Y como has sido fiel en lo poco, yo te pondré al frente de mucho más. Entra y participa en mi propia alegría».

Mateo 25:34

Luego el rey dirá a los unos: «Venid, benditos de mi Padre; recibid en propiedad el reino que se os ha preparado desde el principio del mundo.

Marcos 10:17

Iba Jesús de camino, cuando vino uno corriendo, se arrodilló delante de él y le preguntó: —Maestro bueno, ¿qué he de hacer para alcanzar la vida eterna?

Romanos 8:14

Los que se dejan conducir por el Espíritu de Dios, esos son hijos de Dios.

Romanos 8:19

La creación, en efecto, espera con impaciencia que se nos descubra lo que serán los hijos de Dios.

2 Corintios 6:16

¿Puede haber algo en común entre el templo de Dios y los ídolos? Pues nosotros somos templos de Dios viviente. Así lo ha dicho Dios mismo: Habitaré y caminaré en medio de ellos; yo seré su Dios y ellos serán mi pueblo.

2 Corintios 6:18

Seré padre para vosotros y vosotros seréis mis hijos e hijas, —dice el Señor todopoderoso.

Hebreos 8:10

Así que esta será —dice el Señor— la alianza que sellaré con Israel cuando llegue aquel día: inculcaré mis leyes en su mente y las escribiré en su corazón; yo seré su Dios y ellos serán mi pueblo.

1 Pedro 3:9

No devolváis mal por mal, ni insulto por insulto. Al contrario, bendecid, pues habéis sido llamados a heredar una bendición.

Apocalipsis 2:11

Quien tenga oídos, preste atención a lo que el Espíritu dice a las iglesias. El vencedor no será presa de la segunda muerte.

Apocalipsis 2:17

Quien tenga oídos, preste atención a lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al vencedor le daré a comer del maná escondido, y le daré también una piedra blanca en la que hay escrito un nombre nuevo, que solo quien lo reciba podrá descifrar.

Apocalipsis 2:25

Solo os pido que lo que ahora poseéis lo conservéis intacto hasta mi venida.

Apocalipsis 2:7

Quien tenga oídos, preste atención a lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al vencedor le daré a comer del árbol de la vida que está en el paraíso de Dios.

Apocalipsis 21:3

Y oí una voz poderosa que decía desde el trono: —Esta es la morada que Dios ha establecido entre los seres humanos. Habitará con ellos, ellos serán su pueblo y él será su Dios.

1 Samuel 2:8

saca del lodo al miserable, levanta de la basura al pobre para sentarlo entre los príncipes y adjudicarle un puesto de honor. Del Señor son los pilares de la tierra y sobre ellos cimentó el universo.