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2 Samuel 24:1 - La Palabra (versión española)

1 El Señor volvió a enojarse con Israel e instigó a David para que les causara daño, diciéndole: —Haz el censo de Israel y de Judá.

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Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

1 Volvió a encenderse la ira de Jehová contra Israel, e incitó a David contra ellos a que dijese: Ve, haz un censo de Israel y de Judá.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

1 Una vez más el enojo del Señor ardió contra Israel, y provocó que David les hiciera daño al levantar un censo. «Ve y cuenta a las personas de Israel y Judá», le dijo el Señor.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

1 De nuevo se encendió contra Israel la cólera de Yavé, quien impulsó a David a causar su desgracia. 'Anda, le dijo, y haz el censo de Israel y Judá'.

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La Biblia Textual 3a Edicion

1 Volvió a encenderse la ira de YHVH contra Israel; e incitó° a David contra ellos para que dijera: Ve, haz un censo de Israel y de Judá.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

1 Volvió a encenderse la cólera de Yahveh contra Israel y por eso instigó a David contra ellos, ordenándole: 'Disponte a hacer el censo de Israel y de Judá'.

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2 Samuel 24:1
23 Referans Kwoze  

Pero no os aflijáis ni os reprochéis el haberme vendido, pues en realidad fue Dios quien me ha enviado aquí antes que a vosotros, para salvar vidas.


Es verdad que vosotros os portasteis mal conmigo, pero Dios lo cambió en bien para hacer lo que hoy estamos viendo: salvar la vida de mucha gente.


Esto dice el Señor: Yo haré que la desgracia te sobrevenga desde tu propia casa. Tomaré tus mujeres en tu propia cara y se las entregaré a tu prójimo, para que se acueste con ellas en tu cara y a la luz de este sol.


Pero el rey le contestó: —¡Esto no es asunto vuestro, hijos de Seruyá! Si me maldice porque Dios le ha ordenado que maldiga a David, ¿quién va a pedirle cuentas?


El rey Jorán salió inmediatamente de Samaría, pasó revista a todo el ejército israelita


Satán se enfrentó a Israel e instigó a David a censar a Israel.


Descendientes de Tolá: Uzí, Refaías, Jeriel, Jajmay, Jibsán y Samuel, jefes de familia de Tolá. En tiempos de David su número, por genealogías, ascendía a veintidós mil guerreros valerosos.


Todos estos descendientes de Aser fueron cabezas de familia, gente selecta, guerreros valerosos y jefes de príncipes, con un censo de veintiséis mil hombres aptos para la guerra.


Sin embargo, Ezequías no correspondió al don recibido, pues se llenó de orgullo, y el Señor se enfureció contra él y contra Judá y Jerusalén.


Sin embargo, yo haré que el faraón se muestre intransigente, y tendré que realizar muchas señales y prodigios en Egipto.


Y si el profeta es seducido y pronuncia un oráculo en esa situación, es que yo, el Señor, he seducido al profeta en cuestión; lo asiré con mi mano y lo haré desaparecer de mi pueblo Israel.


Y hasta les promulgué normas que no eran buenas y preceptos que no servían para dar vida.


Entonces Moisés dijo a Aarón y a sus hijos Eleazar e Itamar: —No os revolváis el pelo ni rasguéis vuestras ropas en señal de duelo, para que no muráis ni se desate la ira del Señor sobre toda la comunidad. Serán todos los demás israelitas, vuestros hermanos, los que podrán lamentarse por el incendio que el Señor envió.


Tal como el Señor le había mandado a Moisés, así él los censó en el desierto del Sinaí.


Llevaron así a cabo todo lo que tu poder y tu voluntad habían decidido de antemano que sucediese.


Por eso Dios les envía un poder seductor de forma que den crédito a la mentira


Entonces se encolerizó el Señor contra Israel y los entregó en manos de salteadores que los saqueaban; los dejó a merced de los enemigos de alrededor y no pudieron ya resistir ante ellos.


Así que el Señor se encolerizó con el pueblo israelita y dijo: —Ya que este pueblo ha quebrantado la alianza que sellé con sus antepasados y no ha escuchado mi voz,


Ruego a mi señor, el rey, que se digne escuchar las palabras de su siervo. Si es el Señor quien te empuja contra mí, se aplacará con una ofrenda; pero si son los hombres, ¡que el Señor los maldiga! Porque hoy me expulsan y me impiden participar en la herencia del Señor, mandándome a servir a otros dioses.


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