2 Reyes 11:14 - La Palabra (versión española)14 Cuando vio al rey de pie sobre el estrado, según la costumbre, a los oficiales y a los que tocaban las trompetas junto al rey, y a todo el pueblo de fiesta, mientras sonaban las trompetas, se rasgó las vestiduras y gritó: —¡Traición! ¡Traición! Gade chapit laPlis vèsyonBiblia Reina Valera 196014 Y cuando miró, he aquí que el rey estaba junto a la columna, conforme a la costumbre, y los príncipes y los trompeteros junto al rey; y todo el pueblo del país se regocijaba, y tocaban las trompetas. Entonces Atalía, rasgando sus vestidos, clamó a voz en cuello: ¡Traición, traición! Gade chapit laBiblia Nueva Traducción Viviente14 Cuando llegó, vio al recién coronado rey de pie en el lugar de autoridad, junto a la columna, como era la costumbre durante las coronaciones. Los comandantes y los trompetistas lo rodeaban, y gente de todo el reino celebraba y tocaba las trompetas. Cuando Atalía vio todo esto, rasgó su ropa en señal de desesperación y gritó: «¡Traición! ¡Traición!». Gade chapit laBiblia Católica (Latinoamericana)14 Y allí vio que el rey estaba de pie en el estrado como era costumbre, los jefes y los que tocaban la trompeta rodeaban al rey, y todo el pueblo estaba de fiesta y tocaban la trompeta. Entonces Atalía rasgó su vestido y exclamó: '¡Traición, traición!' Gade chapit laLa Biblia Textual 3a Edicion14 Y miró, y he aquí el rey estaba de pie junto a la columna, conforme a la costumbre, y los príncipes y las trompetas junto al rey, y todo el pueblo de la tierra estaba alegre y tocaba las trompetas. Entonces Atalía, rasgó sus vestidos y gritó: ¡Traición! ¡Traición! Gade chapit laBiblia Serafín de Ausejo 197514 Al mirar, vio al rey, de pie junto a la columna, conforme a la costumbre, rodeado de los jefes y de los trompeteros, y a toda la gente del país alborozada, mientras sonaban las trompetas. Entonces se rasgó las vestiduras y gritó: '¡Traición, traición!'. Gade chapit la |
Entonces se puso en pie junto a la columna y selló la alianza ante el Señor, comprometiéndose a seguirlo, a observar sus mandamientos, normas y preceptos con todo el corazón y toda el alma y a cumplir todas las estipulaciones contenidas en el libro de la Alianza. Y todo el pueblo se comprometió con esta alianza.