Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





2 Corintios 2:14 - La Palabra (versión española)

14 Gracias sean dadas a Dios, que en todo momento nos asocia al cortejo triunfal de Cristo y que, valiéndose de nosotros, esparce por todas partes como suave aroma su conocimiento.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

14 Mas a Dios gracias, el cual nos lleva siempre en triunfo en Cristo Jesús, y por medio de nosotros manifiesta en todo lugar el olor de su conocimiento.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

14 Así que, ¡gracias a Dios!, quien nos ha hecho sus cautivos y siempre nos lleva en triunfo en el desfile victorioso de Cristo. Ahora nos usa para difundir el conocimiento de Cristo por todas partes como un fragante perfume.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

14 Gracias sean dadas a Dios, que siempre nos lleva en el desfile victorioso de Cristo y que por nuestro ministerio difunde por todas partes su conocimiento cual fragancia de incienso.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

14 Pero gracias sean dadas° a Dios, quien siempre nos hace triunfar en el Mesías,° y por medio de nosotros manifiesta la fragancia de sí mismo en todo lugar.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

14 Pero gracias sean dadas a Dios, que, en Cristo, nos lleva siempre en su triunfo y que por medio de nosotros difunde por doquier la fragancia de su conocimiento.

Gade chapit la Kopi




2 Corintios 2:14
27 Referans Kwoze  

Señor, Dios nuestro, sálvanos. Reúnenos de entre las naciones para que alabemos tu santo nombre y nos llene de orgullo tu alabanza.


Él reviste de fortaleza a su pueblo, es motivo de alabanza para sus fieles, para Israel, su pueblo cercano. ¡Aleluya!


el olor de tu perfume es exquisito, tu nombre es esencia penetrante, ¡por eso te aman las muchachas!


Os acogeré gustosamente, como aroma que aplaca, cuando os saque de entre los pueblos y os reúna de los países por los que os dispersasteis; y pondré de manifiesto mi santidad en vosotros, a la vista de las naciones.


Os he dicho todo esto para que, unidos a mí, encontréis paz. En el mundo tendréis sufrimientos; pero ¡ánimo!, yo he vencido al mundo.


Quiero empezar dando gracias por todos vosotros a mi Dios, mediante Jesucristo, porque en el mundo entero se habla con admiración de vuestra fe.


de señales y prodigios, y del poder del Espíritu. De este modo, desde Jerusalén y viajando en todas direcciones hasta llegar a Iliria, he proclamado a fondo el evangelio de Cristo.


Gracias a Dios, vosotros, que erais en otro tiempo esclavos del pecado, os habéis sometido de todo corazón al modelo de enseñanza que os ha sido transmitido.


Pero Dios, que nos ha amado, nos hace salir victoriosos de todas estas pruebas.


Así, a uno lo capacita el Espíritu para hablar con sabiduría, mientras a otro el mismo Espíritu le concede expresarse con un profundo conocimiento de las cosas.


Y lo que siembras no es la planta entera que después ha de brotar, sino un simple grano, de trigo o de cualquier otra semilla.


Pero nosotros hemos de dar gracias a Dios, que por medio de nuestro Señor Jesucristo nos concede la victoria.


Cuento para ello con la ayuda de vuestras oraciones; de esta manera, siendo muchos los que han contribuido a que Dios me conceda su favor, otros tantos serán los que den gracias a Dios por causa de mí.


Doy gracias a Dios por haber hecho que Tito comparta mi preocupación por vosotros.


Demos gracias a Dios por este don suyo tan grandioso.


y haced del amor la norma de vuestra vida, pues también Cristo nos amó y se entregó a sí mismo por nosotros como ofrenda y sacrificio de olor agradable a Dios.


dando gracias siempre y por todo a Dios Padre en el nombre de nuestro Señor Jesucristo.


Acuso, pues, recibo de todo, que ha sido más que suficiente. Me siento satisfecho con lo que me habéis enviado por medio de Epafrodito, y que es ofrenda de suave olor y sacrificio que Dios acepta con agrado.


Es necesario, sin embargo, que permanezcáis sólidamente firmes e inconmovibles en la fe y que no traicionéis la esperanza contenida en el evangelio que escuchasteis y que ha sido proclamado a todas las criaturas que se encuentran bajo el cielo, y del que yo, Pablo, me he convertido en servidor.


Un mensaje que ha llegado hasta vosotros y que sigue extendiéndose y dando fruto, tanto en el mundo entero como entre vosotros desde el día mismo en que tuvisteis noticia de la gracia de Dios y la experimentasteis de verdad.


Ha despojado a principados y potestades y los ha convertido en público espectáculo, llevándolos cautivos en su cortejo triunfal.


Y no solo en Macedonia y Acaya habéis hecho resonar la palabra del Señor, sino que vuestra fe en Dios se ha extendido por todas partes, hasta el punto de hacer innecesaria cualquier palabra nuestra.


¿Cómo podremos agradecer a Dios toda esta inmensa alegría que nos hacéis sentir en presencia de nuestro Dios?


Es, pues, mi deseo que en cualquier circunstancia los varones eleven una oración pura, libre de odios y altercados.


Y lo que me oíste proclamar en presencia de tantos testigos, confíalo a personas fieles, capaces a su vez de enseñarlo a otras personas.


diciendo: —Amén. A nuestro Dios la alabanza, la gloria, la sabiduría, la acción de gracias, el honor, el poder y la fuerza por siempre. Amén.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite