1 Pedro 3:4 - La Palabra (versión española)

⁴ cuanto el interior, el del corazón: el adorno incorruptible de un espíritu apacible y sereno, que es la auténtica belleza a los ojos de Dios.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

⁴ sino el interno, el del corazón, en el incorruptible ornato de un espíritu afable y apacible, que es de grande estima delante de Dios.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁴ En cambio, vístanse con la belleza interior, la que no se desvanece, la belleza de un espíritu tierno y sereno, que es tan precioso a los ojos de Dios.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁴ sino que más bien irradie de lo íntimo del corazón la belleza que no se pierde, es decir, un espíritu suave y tranquilo. Eso sí que es muy precioso ante Dios.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁴ sino el interior del corazón del ser, en lo incorruptible de un espíritu afable y apacible, el cual es muy precioso delante de Dios.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁴ sino que sea el interior del corazón, un inalterable espíritu suave y tranquilo. Esto es lo precioso ante Dios.

1 Pedro 3:4 Referans Kwoze

Salmos 131:2

Estoy en calma, estoy tranquilo, como un niño en el regazo de su madre, como un niño, así estoy yo.

Salmos 147:6

El Señor levanta a los humildes, a los malvados hunde en la tierra.

Salmos 149:4

porque el Señor ama a su pueblo, a los humildes honra con la victoria.

Salmos 25:9

instruye en la justicia a los humildes, enseña a los humildes su camino.

Salmos 45:13

Toda radiante entra la hija del rey, de brocado de oro es su vestido.

Salmos 51:6

Tú amas la verdad en lo más íntimo, la sabiduría me muestras en lo oculto.

Isaías 11:4

juzgará con justicia a los pobres, con rectitud a los humildes de la tierra; herirá al violento con la vara de su boca, con el soplo de sus labios matará al malvado;

Isaías 29:19

Otra vez la gente desgraciada gozará de la ayuda del Señor; los más pobres de la sociedad se alegrarán en el Santo de Israel.

Isaías 57:15

Pues esto dice el Alto y Excelso, el que vive por siempre, de nombre Santo: Yo habito en las alturas sagradas, pero miro por humildes y abatidos, para reanimar el espíritu abatido, para reanimar el corazón humillado.

Isaías 61:1

El espíritu del Señor Dios me acompaña, pues el propio Señor me ha ungido, me ha enviado a dar la buena noticia a los pobres, a vendar los corazones destrozados, a proclamar la libertad a los cautivos, a gritar la liberación a los prisioneros,

Jeremías 51:59

Encargo que dio el profeta Jeremías a Seraías, hijo de Nerías y nieto de Majsías, cuando fue a Babilonia con Sedecías, rey de Judá. Corría el año cuarto de su reinado, y Seraías era jefe de intendencia.

Mateo 11:29

¡Poned mi yugo sobre vosotros y aprended de mí, que soy sencillo y humilde de corazón! Así encontraréis descanso para vuestro espíritu,

Mateo 21:5

Decid a Jerusalén, la ciudad de Sion: Mira, tu Rey viene a ti lleno de humildad, montado en un asno, en un pollino, hijo de animal de carga.

Mateo 23:26

¡Fariseo ciego, limpia primero la copa por dentro, y así quedará limpia también por fuera!

Mateo 5:5

Felices los humildes, porque Dios les dará en herencia la tierra.

Lucas 11:40

¡Insensatos! ¿Acaso el que hizo lo de fuera no hizo también lo de dentro?

Lucas 16:15

Él les dijo: —Vosotros pretendéis pasar por gente de bien delante de los demás, pero Dios sabe lo que hay en vuestro corazón; y aquello que la gente juzga valioso, para Dios es solo basura.

Romanos 1:23

que llegaron a cambiar la grandeza del Dios que nunca muere por imágenes de personas mortales, y aun de pájaros, de cuadrúpedos y de reptiles.

Romanos 2:29

Lo que distingue al auténtico judío es su interior, y la auténtica circuncisión es la del corazón, obra del Espíritu y no de reglas escritas. Y no serán los seres humanos, sino Dios, quien la alabe.

Romanos 6:6

Tened en cuenta que nuestra antigua condición pecadora fue clavada junto con Cristo en la cruz, para que así quedara destruido este cuerpo sometido al pecado y nosotros quedáramos liberados de su servidumbre.

Romanos 7:22

En mi interior humano me complazco en la ley de Dios;

2 Corintios 10:1

Por la dulzura y la bondad de Cristo os lo pido yo, Pablo, tan cobarde cuando estoy entre vosotros y tan valiente, en cambio, por carta.

2 Corintios 4:16

Esta es la razón por la que nunca nos desanimamos. Aunque nuestro cuerpo mortal se va desmoronando, nuestro ser interior va recibiendo día tras día nueva vida.

Gálatas 5:23

humildad y dominio de sí mismo. Ninguna ley existe en contra de todas estas cosas.

Efesios 4:2

Sed humildes, amables, comprensivos. Soportaos unos a otros con amor.

Colosenses 3:12

Sois elegidos de Dios; él os ha consagrado y os ha otorgado su amor. Sed, pues, profundamente compasivos, benignos, humildes, pacientes y comprensivos.

Colosenses 3:3

Porque habéis muerto y vuestra vida está escondida con Cristo en Dios.

1 Tesalonicenses 4:11

que procuréis vivir tranquilos, que os ocupéis de vuestros asuntos y que trabajéis con vuestras manos, según las instrucciones que os dimos.

2 Tesalonicenses 3:12

De parte de Jesucristo, el Señor, los instamos y exhortamos a que trabajen y coman su propio pan sin perturbar a nadie.

1 Timoteo 2:2

por los reyes y por todos los que tienen autoridad para que podamos llevar una vida tranquila y sosegada, plenamente digna y piadosa.

2 Timoteo 2:25

y capaz de corregir con dulzura a los contradictores.

Tito 3:2

que no ofendan a nadie ni se peleen con nadie; que se muestren afables y llenos de dulzura con todo el mundo.

Santiago 1:21

Por tanto, renunciando a todo vicio y al mal que nos cerca por doquier, acoged dócilmente la palabra que, plantada en vosotros, es capaz de salvaros.

1 Pedro 1:23

ya que habéis nacido de nuevo, no de un germen mortal, sino de uno inmortal, mediante la palabra de Dios viva y permanente.

1 Pedro 3:15

Glorificad en vuestro corazón a Cristo, el Señor, estando dispuestos en todo momento a dar razón de vuestra esperanza a cualquiera que os pida explicaciones. Pero, eso sí, hacedlo con dulzura y respeto,

1 Samuel 16:7

Pero el Señor le dijo: —No valores solo su aspecto y su buena planta, porque yo lo he descartado. Aquí no valen miras humanas. Pues vosotros os fijáis en las apariencias, pero yo miro al corazón.