1 Corintios 15:17 - La Palabra (versión española)

¹⁷ Y si Cristo no ha resucitado, vuestra fe carece de valor y aún seguís hundidos en el pecado.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹⁷ y si Cristo no resucitó, vuestra fe es vana; aún estáis en vuestros pecados.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁷ y si Cristo no ha resucitado, entonces la fe de ustedes es inútil, y todavía son culpables de sus pecados.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁷ Y si Cristo no resucitó, de nada les sirve su fe: ustedes siguen en sus pecados.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁷ Y si el Mesías no fue resucitado, vuestra fe es inútil:° aún estáis en vuestros pecados,

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁷ Y si Cristo no ha sido resucitado, vana es vuestra fe; aún estáis en vuestros pecados.

1 Corintios 15:17 Referans Kwoze

Ezequiel 33:10

Hijo de hombre, di a los israelitas: Vosotros andáis diciendo: «Nuestros delitos y pecados nos abruman, y nos sentimos consumidos por ellos. ¿Cómo podremos vivir?».

Hechos 5:31

Ha sido Dios quien lo ha elevado a la máxima dignidad y lo ha constituido jefe y salvador, para ofrecer a la nación israelita la ocasión de convertirse y de alcanzar el perdón de los pecados.

Romanos 4:25

a quien Dios entregó a la muerte por nuestros pecados y resucitó para ser nuestra salvación.

Romanos 5:10

Y si, siendo enemigos, Dios nos reconcilió consigo mediante la muerte de su Hijo, con mayor razón, ya reconciliados, nos liberará y nos hará participar de su vida.

1 Corintios 15:14

Y si Cristo no ha resucitado, tanto nuestro anuncio como vuestra fe carecen de sentido.

1 Corintios 15:16

Porque si los muertos no resucitan, es que no ha resucitado Cristo.

1 Corintios 15:2

y por el que estáis en camino de salvación, si es que lo conserváis tal como yo os lo anuncié. De lo contrario, se habrá echado a perder vuestra fe.

1 Pedro 1:21

Gracias a él, creéis en Dios, que lo resucitó de la muerte y lo llenó de gloria para que de esta manera vuestra fe y vuestra esperanza descansen en Dios.

1 Pedro 1:3

Bendito sea Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo que, por su inmenso amor y mediante la resurrección de Jesucristo de la muerte, nos ha hecho renacer a una esperanza viviente,