Proverbios 4:7 - Biblia Lenguaje Básico

⁷ Lo que realmente importa es tener sensatez y sabiduría, aunque para adquirirlas haya que vender todo lo que uno posee.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

⁷ Sabiduría ante todo; adquiere sabiduría; Y sobre todas tus posesiones adquiere inteligencia.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁷ ¡Adquirir sabiduría es lo más sabio que puedes hacer! Y en todo lo demás que hagas, desarrolla buen juicio.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁷ El principio de la sabiduría es correr tras ella; ¡busca la inteligencia a cambio de todo lo que tienes!'

La Biblia Textual 3a Edicion

⁷ Sabiduría ante todo, adquiere sabiduría, Y sobre toda posesión tuya adquiere inteligencia.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁷ Lo primero es la sabiduría: adquiérela; da cuanto posees para comprar prudencia.

Proverbios 4:7 Referans Kwoze

Proverbios 16:16

La sabiduría y el entendimiento valen más que el oro y la plata.

Proverbios 21:6

Las riquezas que amontona el mentiroso se desvanecen como el humo y se convierten en una trampa mortal.

Proverbios 23:23

Acumula verdad y sabiduría, disciplina y entendimiento, ¡y no los cambies por nada!

Proverbios 4:5

Esfuérzate en ser cada vez más sabio y entendido; no olvides ni te apartes de mis enseñanzas.

Proverbios 8:23

Aún no había creado la tierra cuando antes que nada me formó a mí.

Eclesiastés 4:8

Me refiero a la persona solitaria, que no tiene hijos ni hermanos: se pasa todo el tiempo trabajando y nunca está satisfecha; siempre quiere tener más. Esa persona jamás se pone a pensar si vale la pena trabajar tanto para no disfrutar de ello. En realidad, es algo que no tiene sentido y solo produce disgustos.

Eclesiastés 7:12

La sabiduría protege, y el dinero también, pero la sabiduría alarga la vida de quien la posee.

Lucas 12:20

Pero Dios le dijo: «¡Qué necio eres! Esta misma noche vas a morir, y otros disfrutarán de todo esto que has guardado».

Filipenses 3:8

Todo eso lo he dejado a un lado, y lo considero basura, con tal de llegar a conocer bien a Cristo, pues no hay mejor conocimiento. Y quiero que Dios me acepte, no por haber obedecido la ley, sino por creer en Cristo, pues así, a través de la fe, es como Dios quiere aceptarnos.