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Proverbios 14:8 - Biblia Lenguaje Básico

8 El que es sabio lo demuestra en que piensa bien lo que hace, pero el necio vive engañado por su propia estupidez.

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Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

8 La ciencia del prudente está en entender su camino; Mas la indiscreción de los necios es engaño.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

8 Los prudentes saben a dónde van; en cambio, los necios se engañan a sí mismos.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

8 La sabiduría del hombre hábil consiste en saber a dónde va; la necedad de los tontos los extravía.

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La Biblia Textual 3a Edicion

8 Discernir el camino es sabiduría del sagaz, Pero la necedad de los necios es puro engaño.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

8 Sabiduría del prudente es conocer su camino; la locura de los necios es un engaño.

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Proverbios 14:8
21 Referans Kwoze  

Si alguien quiere ser sabio, que empiece por obedecer a Dios. Quienes lo hacen así demuestran inteligencia. ¡Dios merece ser siempre alabado!


Quiero mantenerme fiel en el cumplimiento de tus normas.


Tú me hiciste con tus propias manos; ¡hazme aprender tus mandamientos!


Desde el comienzo del día, haz que experimente tu amor, pues he puesto en ti mi confianza; dime cómo debo comportarme, pues a ti dirijo mi oración.


Las ganancias del malvado no pasan de ser engañosas; quien hace el bien tiene la recompensa asegurada.


La gente buena hace planes justos; la malvada solo piensa en engañar.


El necio encuentra graciosa su falta de inteligencia; el que es inteligente se porta rectamente.


Solo él te hará entender lo que es bueno y justo, lo que es comportarse rectamente.


Entonces me di cuenta de que ser sabio es como andar en la luz, y que ser tonto es como andar a oscuras,


Pues como los sabios mueren igual que los tontos, y como todo se olvida con el tiempo, nadie volverá a acordarse ni de unos ni de otros.


Mirad, los que vivís en Jerusalén, cómo vienen del norte vuestros enemigos. Estabais muy orgullosos de ser el pueblo escogido por Dios, pero ese pueblo se ha perdido.


Porque, para Dios, la sabiduría de este mundo es más bien ignorancia. Como dice la Escritura: «Dios hace que los sabios caigan en sus propias trampas».


Por eso, ya no debéis vivir ni comportaros como antes, cuando los malos deseos dirigían vuestra manera de vivir.


No seáis insensatos, sino tratad de averiguar qué es lo que Dios quiere que hagáis.


Pero los malvados y los engañadores irán de mal en peor; engañarán a los demás, pero también ellos mismos serán engañados.


Si alguno de vosotros presume de sabio y entendido, que lo demuestre haciendo el bien y portándose con amabilidad.


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