13-16 Además de las ofrendas diarias, el primero de esos siete días ofreceréis en sacrificio quemándolos por completo trece toros, dos carneros y catorce corderos de un año, sin defecto alguno. Con cada toro me presentaréis seis kilos de la mejor harina amasada con aceite; con cada carnero ofreceréis cuatro kilos, y con cada cordero, dos kilos. También ofreceréis en sacrificio un chivo para que yo os perdone vuestros pecados. Esto será un sacrificio como ofrenda de aroma agradable para mí.
13 Y ofreceréis en holocausto, en ofrenda encendida a Jehová en olor grato, trece becerros de la vacada, dos carneros, y catorce corderos de un año; han de ser sin defecto.
13 El primer día del festival presenten, como ofrenda especial, una ofrenda quemada como aroma agradable al Señor: trece becerros, dos carneros y catorce corderos de un año, todos sin defecto.
13 Ofreceréis como holocausto, sacrificio ígneo de olor que apacigua a YHVH, trece becerros de la vacada, dos carneros y catorce corderos añales. Serán sin defecto.
13 Ofreceréis en holocausto, como manjar pasado por el fuego de calmante aroma en honor de Yahveh, trece novillos, dos carneros y catorce corderos de un año, sin defecto.
También celebraron la fiesta de las Enramadas de acuerdo con lo que ordenaba la ley, y ofrecieron diariamente la cantidad de sacrificios que correspondía. También ofrecieron las ofrendas acostumbradas en la fiesta de la luna nueva y en todas las demás fiestas dedicadas a Dios. Además presentaban a Dios ofrendas voluntarias.
Además, el primer día de cada mes sacrificaréis y quemaréis por completo en mi honor dos toros, un carnero y siete corderos de un año sin defecto alguno.
El día quince de ese mismo mes nadie trabajará; sino que todo el pueblo se reunirá en asamblea para adorarme. Ese día dará comienzo una fiesta en mi honor, que durará siete días.
Además de las ofrendas diarias y de las que se ofrecen por los pecados, ese día me ofreceréis en sacrificio quemándolos por completo un toro, un carnero y siete corderos de un año, sin defecto alguno. Con el toro me presentaréis seis kilos de la mejor harina amasada con aceite; con el carnero ofreceréis cuatro kilos, y con cada cordero, dos kilos. También me ofreceréis en sacrificio un chivo para que yo os perdone vuestros pecados. Esto será un sacrificio como ofrenda de aroma agradable para mí.
Por eso, hermanos míos, ya que Dios es tan bueno con vosotros, os pido que dediquéis toda la vida a servirle y a hacer todo lo que le agrada. Así es como se le debe adorar.