Los descendientes de Jacob y Zilpá, la esclava que Labán había dado a su hija Lía, fueron los siguientes: En primer lugar Gad y sus hijos: Sifión, Jaguí, Suní, Esbón, Erí, Arodí y Arelí. Y en segundo lugar Aser y sus hijos: Jimná, Jisvá, Jisví, Beriá y Seraj. En cuanto a Beriá, tuvo dos hijos: Jéber y Malquiel. En total, los descendientes de Jacob y Zilpá fueron dieciséis.