Vosotros regresáis ahora con muchas riquezas. Habéis quitado a vuestros enemigos vacas, ovejas, oro, plata, bronce, hierro y gran cantidad de ropa. Compartid todo eso con vuestros familiares. Le pido a Dios que os bendiga y os trate bien. Podéis regresar a vuestras tierras. Las tribus de Rubén y de Gad dejaron a los demás israelitas en Siló, en la región de Canaán, y regresaron a sus territorios. Se fueron a la región de Galaad, en la que se habían establecido por una orden de Dios recibida a través de Moisés. Moisés ya había asignado tierras a media tribu de Manasés en Basán, al este del río Jordán. Josué le asignó tierras a la otra mitad de Manasés, al oeste del Jordán.