Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Jueces 16:28 - Biblia Lenguaje Básico

28 En ese momento Sansón oró así: —¡Dios todopoderoso, ayúdame solo una vez más! Los filisteos se han burlado de mí sacándome los ojos; te ruego que me des fuerzas para vengarme de ellos.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

28 Entonces clamó Sansón a Jehová, y dijo: Señor Jehová, acuérdate ahora de mí, y fortaléceme, te ruego, solamente esta vez, oh Dios, para que de una vez tome venganza de los filisteos por mis dos ojos.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

28 Entonces Sansón oró al Señor: «Señor Soberano, acuérdate de mí otra vez. Oh Dios, te ruego que me fortalezcas solo una vez más. Con un solo golpe, déjame vengarme de los filisteos por la pérdida de mis dos ojos».

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

28 Entonces Sansón invocó a Yavé y le dijo: '¡Por favor, Señor Yavé! Acuérdate de mí y dame fuerza por última vez. ¡Quisiera hacerles pagar a los filisteos mis dos ojos de un solo golpe!'

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

28 Sansón entonces invocó a YHVH y exclamó: ¡YHVH Señor mío, te ruego que te acuerdes de mí! ¡Dame fuerza sólo esta vez, oh ’Elohim, para que con una sola venganza me vengue de los filisteos por mis dos ojos!

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

28 Sansón invocó a Yahveh y exclamó: '¡Señor mío, Yahveh, acuérdate de mí y dame fuerzas sólo por esta vez, oh Dios, para que yo pueda de una vez vengarme de los filisteos por lo de mis ojos!'.

Gade chapit la Kopi




Jueces 16:28
19 Referans Kwoze  

Dios nuestro, ¡castígalos tú! Nosotros no podemos hacer frente a un ejército tan grande. ¡Ni siquiera sabemos qué hacer! Por eso nos dirigimos a ti en busca de ayuda.


Es tiempo de que actúes, Dios mío, y pidas cuentas a esos malvados. ¿Por qué han de burlarse de ti? ¡Pídeles cuentas de su maldad, y bórralos de este mundo! ¿Por qué han de creer que no les pedirás cuentas? Tú conoces su maldad, tomas en cuenta su violencia, y un día les darás su merecido hasta hacerlos desaparecer. Porque en ti confían, Dios mío, no te olvides de los humildes, los huérfanos y desvalidos; tú eres quien los ayuda.


Entonces supliqué a Dios: «Salva, Dios mío, mi vida».


Destruye a mis enemigos, pues me amas a mí que soy tu siervo, y acaba con todos los que me persiguen.


¡Llámame cuando tengas problemas! Yo vendré a liberarte, y tú proclamarás mi grandeza».


Cuando me llame, le responderé y estaré con él en su angustia; lo libraré y lo llenaré de honores,


Jeremías respondió: Dios mío, tú lo sabes todo; tú bien sabes que, por ti, soporto que me insulten. ¡Acuérdate de mí, y ven a ayudarme! ¡No te quedes cruzado de brazos y castiga a los que me persiguen antes de que acaben conmigo!


Creí que ya nunca saldría del fondo del mar ni que escaparía del reino de los muertos. Pero tú, Dios mío, me salvaste la vida.


Ten cuidado con Alejandro, el herrero, pues me ha hecho mucho daño y está en contra de lo que enseñamos. Pero yo sé que el Señor Jesucristo le tendrá en cuenta lo que ha hecho.


¿Qué más os puedo decir? No me alcanzaría el tiempo para hablaros de la fe que tuvieron Gedeón, Barac, Sansón, Jefté, David, Samuel y los profetas.


Decían con fuerte voz: —Dios todopoderoso, tú eres santo y siempre dices la verdad. ¿Cuándo nos harás justicia y vengarás la muerte que nos dieron los habitantes de la tierra?


Sintió entonces Sansón una gran sed; así que suplicó a Dios: —¿Después de darme una victoria tan grande, me vas a dejar morir de sed? ¿Vas a dejar que esos paganos me capturen?


El templo estaba lleno de hombres y mujeres. Además de los jefes de los filisteos, había en la terraza unas tres mil personas que se divertían viendo a Sansón.


Dicho esto, Sansón apoyó sus dos manos sobre las columnas centrales que sostenían el templo


Que sean, oh Dios, destruidos todos tus enemigos, pero que tus amigos brillen como el sol de mediodía! Después de eso hubo cuarenta años de paz en todo el territorio.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite