Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Jueces 12:4 - Biblia Lenguaje Básico

4 Pero los de Efraín le contestaron: —La verdad es que los de Galaad no sois más que unos refugiados en nuestras tierras, pues vivís en un territorio que pertenece parte a la tribu de Efraín y parte a la de Manasés. Entonces Jefté reunió a todos los hombres de Galaad y luchó contra los de Efraín y los venció.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

4 Entonces reunió Jefté a todos los varones de Galaad, y peleó contra Efraín; y los de Galaad derrotaron a Efraín, porque habían dicho: Vosotros sois fugitivos de Efraín, vosotros los galaaditas, en medio de Efraín y de Manasés.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

4 La gente de Efraín contestó: —Ustedes, los de Galaad, no son más que fugitivos de Efraín y de Manasés. Entonces Jefté reunió a todos los hombres de Galaad, atacó a los hombres de Efraín y los derrotó.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

4 Jefté reunió a todos los hombres de Galaad y se trabó en combate con Efraín. Los hombres de Galaad aplastaron a los de Efraín que decían: 'Ustedes, gente de Galaad, no son más que desertores de Efraín, ustedes se pasaron de Efraín a Manasés'.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

4 Entonces Jefté juntó a todos los varones de Galaad e hizo guerra contra Efraín. Y los hombres de Galaad derrotaron a Efraín, porque éstos habían dicho: ¡Fugitivos de Efraín sois vosotros galaaditas, en medio de Efraín y en medio de Manasés!

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

4 Entonces Jefté reunió a todos los hombres de Galaad y declaró la guerra a Efraín. Los de Galaad derrotaron a los de Efraín, que decían: '¡Vosotros, galaaditas, sois tránsfugas de Efraín, de en medio de Efraín, en medio de Manasés!'.

Gade chapit la Kopi




Jueces 12:4
11 Referans Kwoze  

Elías era un profeta de Tisbé, pueblo que estaba en la región de Galaad. Un día, Elías anunció a Ajab: —Juro por el Dios de Israel, a quien sirvo, que durante varios años no va a llover ni a caer rocío hasta que yo lo diga.


La gente de Judá se quejaba diciendo: —Ya no tenemos fuerzas, y los escombros son muchos. No podremos terminar de reconstruir la muralla.


Los israelitas eran buenos guerreros, pero se acobardaron y no entraron en batalla.


Los malvados caen en la trampa de sus propias mentiras; los buenos superan los problemas.


La respuesta amable calma el enfado; la respuesta grosera lo enciende más.


Los dirigentes israelitas le aseguraron: —Dios es nuestro testigo de que así lo haremos, tal como dices.


Al ver que no veníais a echarme una mano, decidí arriesgar mi vida y ataqué a los amonitas. Y si Dios me ayudó a vencerlos, ¿por qué ahora venís a protestar?


Para que los de Efraín no pudieran escapar, los de Galaad se quedaron vigilando los vados del río Jordán. Cuando algún fugitivo de Efraín se acercaba para cruzar el río, los de Galaad le preguntaban: «¿Eres de la tribu de Efraín?». Si aquel respondía que no,


pero Nabal les contestó: —¿Y quién es ese David, hijo de Jesé? ¡Seguramente es uno de esos esclavos que huyen de sus amos!


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite