Juan 9:28 - Biblia Lenguaje Básico

²⁸ Los judíos lo insultaron y le dijeron: —Seguidor de ese hombre lo serás tú. Nosotros somos seguidores de Moisés.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

²⁸ Y le injuriaron, y dijeron: Tú eres su discípulo; pero nosotros, discípulos de Moisés somos.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²⁸ Entonces ellos lo insultaron y dijeron: —Tú eres su discípulo, ¡pero nosotros somos discípulos de Moisés!

Biblia Católica (Latinoamericana)

²⁸ Entonces comenzaron a insultarlo. 'Tú serás discípulo suyo. Nosotros somos discípulos de Moisés.

La Biblia Textual 3a Edicion

²⁸ Y lo insultaron y dijeron: ¡Tú eres discípulo suyo, pero nosotros somos discípulos de Moisés!

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²⁸ Pero ellos lo llenaron de improperios y le dijeron: '¡Tú serás discípulo de ése, que nosotros somos discípulos de Moisés!

Juan 9:28 Referans Kwoze

Isaías 51:7

Escuchadme, los que conocéis lo que es bueno y lleváis en el corazón mi ley. No temáis ni os desalentéis por los insultos de la gente,

Mateo 27:39

La gente que pasaba por allí insultaba a Jesús y se burlaba de él, haciéndole muecas

Mateo 5:11

Felices vosotros cuando, por ser mis discípulos, la gente os insulte, os persiga y diga toda clase de mentiras contra vosotros. ¡Alegraos! ¡Estad contentos! Porque vais a recibir un gran premio en el cielo. Así maltrataron también a los profetas que vivieron antes que vosotros.

Juan 7:19

Moisés os dio la ley y, sin embargo, ninguno la obedece. ¿Por qué queréis matarme?

Juan 9:34

Entonces le contestaron: —Ahora resulta que tú, siendo pecador desde que naciste, nos vas a enseñar. Y lo echaron fuera de la sinagoga.

Romanos 2:17

Algunos decís con orgullo que sois judíos. Os sentís muy seguros porque tenéis la ley de Moisés y estáis orgullosos de vuestro Dios.

1 Corintios 4:12

Nos cansamos trabajando con nuestras manos. Bendecimos a los que nos insultan. Cuando sufrimos, lo soportamos con paciencia.

1 Pedro 2:23

Cuando lo insultaban, jamás contestaba con insultos y jamás amenazó a quienes le hicieron sufrir; al contrario, se puso en manos de Dios que es quien juzga a todos con justicia.