Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Juan 13:34 - Biblia Lenguaje Básico

34 Os doy un mandamiento nuevo: Amaos unos a otros de la misma manera que yo os he amado.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

34 Un mandamiento nuevo os doy: Que os améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

34 Así que ahora les doy un nuevo mandamiento: ámense unos a otros. Tal como yo los he amado, ustedes deben amarse unos a otros.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

34 Les doy un mandamiento nuevo: que se amen los unos a los otros. Ustedes deben amarse unos a otros como yo los he amado.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

34 Un mandamiento nuevo os doy: Que os améis unos a otros;° como os he amado, que también os améis unos a otros.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

34 'Un mandamiento nuevo os doy: que os améis los unos a los otros; que así os améis los unos a los otros como yo os he amado.

Gade chapit la Kopi




Juan 13:34
38 Referans Kwoze  

Soy amigo de los que te honran y de los que te obedecen.


Que sean otros los que adoren a las divinidades de esta tierra que antes me hacían feliz; yo no rendiré culto a esos dioses ni les presentaré ninguna ofrenda.


No seáis rencorosos ni vengativos, antes bien que cada uno ame a su prójimo como se ama a sí mismo. Yo soy vuestro Dios.


antes bien tratadlos como si fueran israelitas y amadlos como si de vosotros mismos se tratara, pues también vosotros fuisteis extranjeros en Egipto. Yo soy vuestro Dios.


Pero ahora yo os digo: Amad a vuestros enemigos y orad por los que os maltratan.


Esto os mando: Que os améis unos a otros.


Te pido, Padre, que se mantengan unidos entre ellos, y lo mismo que tú y yo estamos unidos, que también ellos se mantengan unidos a nosotros. Así la gente de este mundo creerá que tú me enviaste.


Amaos unos a otros como hermanos, y respetaos siempre.


El amor no causa daño a nadie. Cuando amamos a los demás, estamos cumpliendo toda la ley.


No debáis nada a nadie. La única deuda que debéis tener es la de amaros unos a otros. El que ama a los demás ya ha cumplido con todo lo que la ley exige.


En cambio, el Espíritu de Dios nos hace amar a los demás, estar siempre alegres y vivir en paz con todos. Nos hace ser pacientes y amables; nos enseña a tratar bien a los demás y a tener confianza en Dios,


Gracias a lo que Cristo hizo, ya no importa si estamos circuncidados o no. Lo que sí importa es que creemos en él, y que esa fe se muestra en el amor a los demás.


Siempre que nos sea posible, hagamos el bien a todos, pero especialmente a los que forman la familia de la fe.


Cuando tengáis dificultades, ayudaos unos a otros. Eso os ayudará a cumplir la ley de Cristo.


Debéis amar a los demás, como Cristo nos amó y se entregó a la muerte por nosotros como si fuera una ofrenda y un sacrificio de aroma agradable que se hace a Dios.


pues hemos sabido de vuestra fe en Cristo y de que amáis a todos los que forman parte del pueblo de Dios.


Le pedimos al Señor que os haga amaros más los unos a los otros y amar también a todos por igual, de la misma manera que os amamos nosotros.


Hermanos míos, en todo momento tenemos que dar gracias a Dios por vosotros. Y así debe ser, pues cada vez crece más vuestra fe en Dios y os amáis más unos a otros.


Amaos siempre los unos a los otros, como hermanos en Cristo.


Si cumplís el mandamiento más importante de la Escritura, haréis muy bien. Ese mandamiento dice: «Ama a tu prójimo como a ti mismo».


Ahora obedecéis el verdadero mensaje de Dios y habéis suprimido todo lo que impide que os améis unos a otros como hermanos. Así que, amaos sinceramente unos a otros, con todo vuestro corazón y con todas vuestras fuerzas.


estimar a vuestros hermanos y, sobre todo, amar a todos de verdad.


Desde el principio se os ha enseñado que debemos amarnos unos a otros.


Y su mandamiento es que creamos en su Hijo Jesucristo y que nos amemos unos a otros tal como Jesús nos lo mandó.


Ha sido Jesucristo quien nos dio este mandamiento: «¡Amad a Dios, y amad también a los hermanos!».


Ahora os pido que nos amemos los unos a los otros. Este mandamiento no es nuevo: es el mismo que se nos dio desde el principio.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite