Josué 6:25 - Biblia Lenguaje Básico

²⁵ Los únicos que se salvaron fueron Rajab y todos los de su familia. Josué la salvó porque ella escondió a los dos espías que él había enviado a Jericó. Hasta el día de hoy hay descendientes de Rajab que viven en Israel.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

²⁵ Mas Josué salvó la vida a Rahab la ramera, y a la casa de su padre, y a todo lo que ella tenía; y habitó ella entre los israelitas hasta hoy, por cuanto escondió a los mensajeros que Josué había enviado a reconocer a Jericó.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²⁵ Así que Josué le perdonó la vida a la prostituta Rahab y a los parientes que estaban en su casa, porque ella escondió a los espías que él había enviado a Jericó. Y Rahab vive con los israelitas hasta el día de hoy.

Biblia Católica (Latinoamericana)

²⁵ Josué dejó con vida a Rahab la prostituta y a la familia de su padre con todo lo que le pertenecía. Esta ha vivido en Israel hasta el día de hoy, porque ocultó a los espías que Josué había enviado para que exploraran Jericó.

La Biblia Textual 3a Edicion

²⁵ Pero Josué preservó la vida a Rahab la ramera, y a la casa de su padre y a todos los suyos. Y ella habita en medio de Israel hasta este día, por cuanto escondió a los emisarios que Josué envió a espiar Jericó.°

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²⁵ Josué perdonó la vida a Rajab, la meretriz, y a la casa de su padre, con todo lo que poseían, y ella vivió en medio de Israel hasta el día de hoy, por haber escondido a los emisarios que Josué había enviado para explorar Jericó.

Josué 6:25 Referans Kwoze

Mateo 1:5

Booz (su madre se llamaba Rajab), Obed (su madre se llamaba Rut), Jesé

Hechos 2:21

Pero yo salvaré a todos los que invoquen mi nombre.

Hebreos 11:31

Rajab, la prostituta, tuvo fe en Dios y trató bien a los exploradores israelitas. Por eso se salvó de morir junto con los que habían desobedecido a Dios.

Santiago 2:25

Así le sucedió a Rajab, la prostituta. Dios la aceptó por haber recibido y escondido a los espías en su casa y por ayudarles también a escapar por otro camino.

Josué 2:1

Josué, hijo de Nun, envió a dos hombres para que exploraran el territorio de Canaán, y en particular la ciudad de Jericó. Los dos hombres salieron de Sitín y, cuando llegaron a Jericó, fueron a la casa de una prostituta llamada Rajab. Allí pasaron la noche.

Josué 2:18

Cuando entremos en este territorio, esta soga roja tiene que estar atada a la ventana por donde ahora vamos a bajar. Reúne en tu casa a todos tus familiares.

Josué 2:4

Pero como ella los había escondido, respondió: —Sí, es verdad. Vinieron unos hombres, pero yo no sabía de dónde eran.

Josué 2:6

La verdad es que Rajab los había llevado a la terraza y los había escondido debajo de unos manojos de lino que allí tenía.

Josué 4:9

Josué también colocó doce piedras en el Jordán, en el lugar donde habían estado los sacerdotes que llevaban el Arca del pacto. Esas piedras todavía están allí.