Josué 23:1 - Biblia Lenguaje Básico1 Había pasado mucho tiempo desde que Dios les había dado a los israelitas la paz con todos los enemigos de alrededor. Para entonces, Josué ya era viejo; Gade chapit laPlis vèsyonBiblia Reina Valera 19601 Aconteció, muchos días después que Jehová diera reposo a Israel de todos sus enemigos alrededor, que Josué, siendo ya viejo y avanzado en años, Gade chapit laBiblia Nueva Traducción Viviente1 Pasaron los años, y el Señor le había dado al pueblo de Israel descanso de todos sus enemigos. Josué, quien ya era muy viejo, Gade chapit laBiblia Católica (Latinoamericana)1 Hacía ya mucho tiempo que Yavé había librado a Israel de todos sus enemigos de los alrededores y le había dado la tranquilidad. En cuanto a Josué, ya estaba viejo y de edad avanzada. Gade chapit laLa Biblia Textual 3a Edicion1 Después de muchos días, cuando YHVH había dado reposo a Israel de todos sus enemigos en derredor, y Josué era anciano, y bien entrado en años, Gade chapit laBiblia Serafín de Ausejo 19751 Pasado ya mucho tiempo desde que Yahveh concedió a Israel tranquilidad por parte de todos sus enemigos de alrededor, siendo Josué ya viejo y de edad avanzada, Gade chapit la |
Asá agradó a Dios con su conducta, y mandó quitar de todas las ciudades de Judá los santuarios locales de las colinas, en los que el pueblo adoraba a dioses falsos; hizo pedazos los ídolos y las imágenes de la diosa Astarté. Además, ordenó a toda la gente de Judá que adorara al Dios de sus antepasados y que siempre obedeciera su ley. De esta manera el país gozó de paz durante su reinado.
Aprovechando este tiempo de paz, Asá dijo al pueblo: —Dios nos ha permitido estar en paz con nuestros enemigos, pues hemos vuelto a obedecer sus mandamientos. ¡Ahora es el momento de reforzar la seguridad de nuestras ciudades! Vamos a construir murallas alrededor de ellas, y torres y puertas bien aseguradas. El pueblo estuvo de acuerdo, y logró fortificar las ciudades con gran éxito.
—Me pedisteis un rey, y he cumplido vuestro deseo: os he dado un rey, que de ahora en adelante os gobernará. Desde mi juventud he sido vuestro jefe y mis hijos viven entre vosotros. Pero ya soy viejo y mis cabellos se han vuelto blancos. Ha llegado el momento de que, delante de Dios y de su rey, digáis cómo me he portado: ¿He sido injusto con alguno? ¿He robado a alguien su buey o su burro? ¿He maltratado o engañado a alguno? ¿He aceptado algún soborno para cometer injusticias? Si algo de esto he cometido, decidlo ahora y yo os pagaré lo que os deba.