Jeremías 40:13 - Biblia Lenguaje Básico

¹³ Un día, Yojanán, hijo de Caréaj, fue a Mispá para hablar con Godolías. Lo acompañaron todos los jefes militares que habían estado dispersos por el campo.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹³ Y Johanán hijo de Carea y todos los príncipes de la gente de guerra que estaban en el campo, vinieron a Gedalías en Mizpa,

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹³ Poco tiempo después, Johanán, hijo de Carea, y los otros líderes militares fueron a ver a Gedalías en Mizpa.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹³ Joanán, hijo de Carea, y todos los jefes guerrilleros se presentaron a Godolías en Mispá,

La Biblia Textual 3a Edicion

¹³ Johanán ben Carea y todos los capitanes que estaban en el campo, vinieron a Gedalías en Mizpa,

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹³ Juan, hijo de Caréaj, y todos los jefes de las tropas que estaban en el campo vinieron a Mispá, donde estaba Godolías,

Jeremías 40:13 Referans Kwoze

Jeremías 40:12

y todos ellos vinieron desde todos los lugares donde estaban dispersos para establecerse en Judá junto al gobernador Godolías, que estaba en Mispá. Allí se dedicaron a cosechar frutos de verano y vino en abundancia.

Jeremías 40:14

Al llegar, le dijeron: —Queremos advertirte que Baalís, el rey de Amón, quiere matarte. Para eso ha contratado a Ismael, hijo de Netanías. Como Godolías no les creyó,

Jeremías 40:8

fueron a Mispá, y se presentaron ante Godolías. Entre ellos estaban Ismael, hijo de Natanías, los hermanos Yojanán y Jonatán, Seraías, Jezanías y los hijos de Efaí.

Jeremías 41:1

Ismael era hijo de Netanías y nieto de Elisamá. Había servido como oficial del rey de Judá, pues pertenecía a la familia del rey. En el séptimo mes, el mes de Etanim, Ismael fue a Mispá y se presentó ante el gobernador Godolías. Iba acompañado de diez soldados. Godolías invitó a comer a Ismael y a sus acompañantes. Allí en Mispá,

Jeremías 42:1

Entonces Yojanán y Azarías, hijo de Osaías, junto con los jefes militares y el pueblo, desde el más viejo hasta el más joven, se presentaron al profeta Jeremías y le dijeron: —Por favor, Jeremías, atiéndenos y ruega a Dios por todos nosotros. Tú bien sabes que antes éramos muchos, pero ahora solo quedamos unos pocos.