Jeremías 32:29 - Biblia Lenguaje Básico29 El ejército babilonio atacará Jerusalén, y prenderá fuego a todas las casas en las que en sus azoteas se quemaba incienso para adorar al dios Baal, y donde se presentaban ofrendas de vino en honor de los dioses falsos. Todo eso lo hacían para ofenderme. Gade chapit laPlis vèsyonBiblia Reina Valera 196029 Y vendrán los caldeos que atacan esta ciudad, y la pondrán a fuego y la quemarán, asimismo las casas sobre cuyas azoteas ofrecieron incienso a Baal y derramaron libaciones a dioses ajenos, para provocarme a ira. Gade chapit laBiblia Nueva Traducción Viviente29 Los babilonios que están fuera de las murallas entrarán y prenderán fuego a la ciudad. Quemarán por completo todas estas casas, donde el pueblo provocó mi enojo al quemar incienso a Baal en las azoteas y al derramar ofrendas líquidas a otros dioses. Gade chapit laBiblia Católica (Latinoamericana)29 los caldeos, que están atacando a esta ciudad, entrarán y le prenderán fuego; arderán todas las casas en cuyas terrazas se quemó incienso a Baal y se derramó vino en honor de otros dioses, para provocarme. Gade chapit laLa Biblia Textual 3a Edicion29 Y los caldeos que atacan esta ciudad, vendrán y le prenderán fuego y la quemarán, así como las casas en cuyas azoteas ofrecían incienso a Baal y derramaban libaciones a dioses ajenos, para provocarme a ira. Gade chapit laBiblia Serafín de Ausejo 197529 Los caldeos que combaten contra esta ciudad entrarán, la pasarán a fuego y la quemarán, junto con las casas en cuyas terrazas incensaron a Baal y libaron libaciones a otros dioses para ofenderme. Gade chapit la |
El rey Sedecías ordenó que me encarcelaran por haber anunciado este mensaje de parte de Dios: —Yo, el Dios de Israel, voy a dejar que el rey de Babilonia conquiste la ciudad de Jerusalén. Ni siquiera Sedecías podrá escapar del poder de los babilonios, sino que caerá en manos del rey de Babilonia. Tendrá que presentarse ante el rey Nabucodonosor que lo llevará preso a su país donde permanecerá hasta que yo decida otra cosa. Si queréis luchar contra los babilonios, hacedlo; pero no os servirá de nada. Soy yo, Dios, quien lo asegura.